Renting, la mejor opción para optimizar la flota de empresa
Aunque es una opción cada vez más conocida, conviene recordar en qué consiste el ‘renting’ de un vehículo. Se trata de un alquiler de larga duración, pese a que lo habitual es que su duración sea de cuatro años. A lo largo de ese periodo se utiliza el vehículo elegido mediante el pago de una cuota fija, habitualmente mensual, que varía en función de multitud de aspectos: desde el vehículo elegido, al kilometraje anual estipulado entre la empresa que ofrece ese servicio y quién lo contrata.
Este último concepto cobra una especial relevancia, ya que el conductor del vehículo es su usuario, pero no su propietario. En un país como España, en el que el sentimiento de propiedad está más arraigado que en otros lugares de Europa, esta circunstancia ha ralentizado la penetración del renting entre los particulares, pero no entre las empresas y autónomos, quiénes pueden desgravarse la cuota mensual y el IVA de este servicio financiero.
Ventajas del renting para empresas y autónomos
Una de las principales ventajas de esta modalidad de financiación son los servicios incluidos en el renting. Los usuarios de vehículos de renting no deben afrontar los costes ligados a la posesión del mismo, como el coste del impuesto de circulación; de la sustitución de los neumáticos; de las revisiones periódicas; del seguro a todo riesgo (incluyendo todas sus prestaciones habituales: servicio de asistencia en carretera, reclamación de multas hasta agotar la vía administrativa); de la ITV si fuera necesaria, y un largo etcétera.
Otra cualidad muy interesante de esta fórmula es que el renting no requiere abonar la entrada inicial, puesto que las cuotas mensuales pueden incluir la cantidad total a la que hay que hacer frente a lo largo de la duración del contrato de renting.
Una vez fijados los servicios recogidos en el contrato de renting, la empresa usuaria del vehículo se despreocupa de la movilidad de su plantilla, dejando de dedicar recursos a gestiones como el abono de tasas, las labores de mantenimiento más comunes y frecuentes, la búsqueda de soluciones si algún vehículo sufre una paralización imprevista… Los supuestos, numerosos y variados, dejan de ser responsabilidad de la empresa que utiliza el vehículo para ser gestionados y solucionados, con la solvencia y efectividad de quien es especialista, por la propietaria del vehículo.
En cuanto a las tareas de mantenimiento, si el servicio de renting es ofrecido por una marca fabricante de coches, serán los talleres oficiales de su red de servicio técnico los encargados de llevarlas a cabo. Una garantía, pues nadie como el propio fabricante conoce sus vehículos y un plus frente a las empresas de renting multimarca. Y todo ello además, de forma programada para evitar pérdidas de tiempo, incluso con la posibilidad, de disponer de un vehículo de sustitución durante el tiempo que dure la intervención.
Un servicio integral de movilidad
Más allá de los beneficios financieros, recurrir al renting de vehículos permite disponer de vehículos nuevos con menores consumos y, por tanto, inferior impacto medioambiental.
En tiempos como los actuales -en los que las empresas tienen en la Responsabilidad Social Corporativa una tarjeta de presentación cada vez más valorada por los clientes-, disponer de una flota de vehículos moderna, transmite conciencia medioambiental y compromiso social. Un ejemplo de esta preocupación por reducir el impacto medioambiental lo encontramos en el Grupo BMW, que es la marca de automoción líder en el sector, según Global Corporate Knights’100, que evalúa a las empresas más sostenibles del mundo.
En este sentido, en el mundo empresarial se está introduciendo un nuevo concepto, el de la huella de carbono, que mide las emisiones de CO2 que lanza una compañía en su actividad cotidiana, incluyendo los desplazamientos de su plantilla.
Disponer de una flota de vehículos moderna y eficiente reduce este parámetro que tarde o temprano, irá adquiriendo relevancia.
Empresarios y trabajadores se benefician del renting
Asimismo, en el caso de sufrir una incidencia imprevista, hay compañías de renting, como BMW Empresas, que ofrecen cobertura de reparación de piezas durante determinados periodos, fijados en las condiciones del contrato. En caso de emergencia, el Servicio de Asistencia 24 horas es el encargado de responder a una avería imprevista en ruta.
Por otro lado, la imagen de la empresa que recurre al renting ofrecido por marcas premium logra diferenciarse de sus competidores. El hecho de que los empleados de una empresa utilicen vehículos de marcas de contrastado prestigio, como BMW, se traslada a la imagen que proyecta la compañía que recurre a esos vehículos.
En definitiva, el renting es un servicio integral de movilidad de especial interés para empresas que dedican sus recursos a su ‘core business’, externalizando todas las cuestiones relacionadas con la movilidad. Empresas que quieran ofrecer a sus empleados vehículos más seguros, más eficientes y en perfecto estado de mantenimiento para que puedan desarrollar su actividad sin paralizaciones imprevistas.
Liberar recursos humanos dedicados a las tareas relacionadas con la disponibilidad de los vehículos permite centrarse en las tareas rentables, mejorando así la eficiencia y centrando los esfuerzos en las actividades que generan ingresos.