Happy packaging: objetivo seducir

Este sería de una forma muy resumida uno de los objetivos que perseguimos con nuestro trabajo. Desarrollar líneas de diseño que atraigan al consumidor y que ayuden a su vez a dotar de personalidad a la marca. Porque no debemos olvidar que las marcas, como las personas, nos dicen mucho de cómo son a través de su apariencia y de su actitud. Y es aquí donde el packaging adquiere todo el protagonismo.

Cada línea de diseño nos comunica cómo es un producto, qué atributos tiene, si es respetuoso o no con el medioambiente …..

El packaging construye la personalidad y es una de las herramientas más directas que tienen las marcas para comunicarse con los consumidores. Además de ser una pieza muy importante dentro del marketing mix, es fundamental a la hora de desarrollar la estrategia de la marca. Estamos ante un espacio donde cada elemento: color, tipografía, material… nos está aportando información. El packaging ayuda a construir marca.

Ejemplo de estos argumentos lo encontramos en el caso de Crusoe Treasure, el packaging de esta botella conformado con piezas de cartón reciclado, comunica de una forma clara la apuesta por el respeto medioambiental de la marca. Una bodega submarina que está recuperando los arrecifes en la bahía de Plentzia. Este diseño fue galardonado con un Best Pack en Alimentaria 2012 y con un Sol de plata en el mismo año.

Nos gustan los diseños creativos, diferentes, con una historia propia… Para que el packaging sea memorable para el público debe conectar con él de algún modo. Y si lo dotamos de narratividad, es más probable que se coloque en la short list del consumidor, porque su recuerdo será más fácil y perdurará.

Si hablamos de vinos, Bravo es un ejemplo de diseño con un storytelling propio. Inspirado en la escultura cabeza de toro de Picasso, el diseño de Bravo, para la D.O Toro de Viñas Altas de El Corte Inglés, traslada al consumidor la calidad y la confianza de la marca. Una línea de diseño icónica y rotunda, con una narratividad que trasciende la creatividad y que se define en la contraetiqueta. Ibérico, indómito y noble. Nunca ataca a traición, se crece en la lucha y jamás huye. Bravo, fiel y majestuoso. Arte en estado puro. Así es nuestro toro y así es Bravo de Viñas Altas. Un vino con carácter que ha conseguido ya varios premios como un Pentawards de oro y un Vertex en 2015.

En Supperstudio llevamos años insistiendo con que hay que arriesgar con el packaging. Ser audaces. Debemos tener siempre claro el propósito de innovar. Hay que olvidarse del miedo y apostar por enfoques diferentes. ¿Por qué no convertir unos zumos de frutas en una auténtica fiesta de disfraces? El diseño de los zumos Eroski es un ejemplo que pone de manifiesto que es posible romper los códigos de color habituales de la categoría y conseguir el reconocimiento de los consumidores.

El público agradece que lo sorprendan. Hay que seducirle, conquistarle. Hay que divertirle, hacerle pensar y, por qué no, hacerle también imaginar, soñar.

Dentro de nuestra filosofía happy packaging hay un elemento que nos parece muy importante y es el humor. Por eso intentamos ponerle una pizca a nuestros trabajos. Y esto es lo que hemos hecho con el packaging de las cortezas Oink Oink de Young and Beautifood. Un diseño que ha sido reconocido con un pencil Wood en los D&AD en 2015, un Vertex y un Pentawards de oro en 2015.

Cortezas por un tubo con un diseño auténtico que siempre consigue arrancar una sonrisa. Una apuesta una vez por la sencillez de las líneas. Porque para nosotros menos siempre es más.

En Supperstudio nos confesamos #happypackagingpracticantes porque después de más de 12 años ayudando a crear marcas tenemos muy claro que nos gusta el packaging, nos gustan los diseños diferentes, especiales, atractivos, que cuenten historias genuinas.