Evitar las paradas y los defectos en los acabados, claves para rendir más
2 de marzo de 2012
Franz Dengler, director de producción de la imprenta Reclam de la ciudad alemana de Ditzingen, conocida por sus libritos amarillos, suele preguntar irónicamente a cualquier empresa encuadernadora que produce sin código de barras o sin modo de comparación de imágenes: “¿Cuánto ha calculado para reclamaciones…?”. Müller Martini aporta este ejemplo para ilustrar la importancia de invertir en instalaciones que minimicen fallos. Uno de esos ejemplos es su línea de encuadernación sin cosido Bolero, que funciona a tres turnos y que cuenta con un sistema automático de reconocimiento de pliegos denominado Asir 3. Este sistema detecta pliegos mal colocados en la alzadora y gracias al AsirCode desarrollado por Müller Martini, también garantiza una secuencia correcta de los pliegos y una calidad reproducible. "Asir 3 nos garantiza un 100% de fiabilidad", señala Franz Dengler.
Costes por unidad más bajos gracias a la elevada automatización
Además de sistemas de control fiables, también las líneas de producción completamente automatizadas contribuyen a un rendimiento neto más alto con efectos positivos en los resultados empresariales. Es el caso de la embuchadora-cosedora Presto E90 y la encuadernadora sin cosido Pantera. “Con sistemas completamente automatizados puedo reducir los costes por unidad. De este modo aumento la productividad y soy más competitivo en el mercado”, señala José Pinto, propietario de Greca Artes Gráficas (Oporto, Portugal) que invirtió en los equipos mencionados.
“Antes producíamos una media de 1.000 libros de encuadernación en rústica por turno. Hoy esa cifra asciende en la Pantera como mínimo a 2.000 ejemplares ¡cada hora!”, explica Daniel Majdiš, jefe de las áreas de Producción y Técnica en Alfaprint (Martin, República Eslovaca). Esto se traduce en un aumento de la productividad del 1.600%.
Otro de los ejemplos que aporta Müller Martini, nos lleva a la imprenta sueca JKJ Bokbinderi AB en Falköping, en la que trabajan solo unas diez personas, y que produce en la actualidad alrededor del 50% más de productos de encuadernación en rústica gracias a la nueva Pantera.
Un servicio técnico regular proporciona una alta protección de la inversión
Según Müller Martini, además de las nuevas inversiones, también un mantenimiento y actualizaciones regulares son condiciones previas fundamentales para el mantenimiento de una alta productividad y rentabilidad. Su máquina Tempo instalada en 1997 en HeiRa GmbH en Gernsheim (Alemania), una de las empresas de encuadernación y manipulación posterior más grandes de Europa, es un buen ejemplo de que las máquinas siguen produciendo a un alto nivel incluso años después de su puesta en marcha. Durante la feria Drupa se estará grapando en esta máquina la milmillonésima revista.