Los usuarios se preocupan por la ‘tecnología verde’, pero confunden el concepto
1 de julio de 2009
Las conclusiones del estudio desvelan que la mayoría de los encuestados no son capaces de identificar los hábitos que más contaminan a la hora de imprimir. Además, las mujeres conocen estas prácticas mejor que los hombres, y se sienten algo más culpables que el género masculino cuando su comportamiento no es todo lo ecológico que podría ser.
Las principales conclusiones son:
- El 91% de los encuestados preferiría arreglar un dispositivo en garantía antes que deshacerse de él.
- El 85% elegiría con frecuencia la opción de impresión más ecológica si está disponible con un solo ‘clic’ o pulsando un botón.
- El 84% estaría más dispuesto a comprar un producto si el fabricante muestra más respeto por el medio ambiente y se preocupa del reciclaje.
- El 75% se siente culpable de imprimir páginas innecesarias.
- El 64% piensa erróneamente que el desecho de los cartuchos es la principal causa de contaminación derivada de la impresión.
Los ciudadanos demandan una responsabilidad compartida
Aunque las tres cuartas partes de los encuestados se sienten culpables acerca de sus hábitos de impresión, muchos consideran que los fabricantes podrían aportar más ayuda y educación; así, sólo 39 de cada 100 encuestados creen que las compañías tecnológicas son lo suficientemente responsables a la hora de reciclar.
En cambio, los resultados sugieren que una actitud ecológicamente responsable por parte de los fabricantes ejerce una gran influencia en la decisión de compra de los consumidores, con un 84% de los encuestados afirmando que estarían más dispuestos a comprar productos de una marca preocupada por el reciclaje.
Los europeos se implican, pero se preocupan menos que los estadounidenses
En general, la mayoría de los europeos (un 69%) se preocupan por los efectos negativos del gasto en papel sobre el medio ambiente, aunque se sienten menos culpables que los estadounidenses (un 78%) de este gasto y del desecho de dispositivos.
Sin embargo, los usuarios europeos confían menos en los programas de reciclado de los fabricantes, en contraste con Estados Unidos y el resto del mundo. Sólo un 37% de los encuestados en Europa cree que los fabricantes hacen lo suficiente en cuestiones de reciclado, frente a casi la mitad (46%) de los estadounidenses americanos y la media global del 39%.
Las mujeres tienen mayor conciencia ecológica
En los 21 países implicados en el estudio las mujeres han mostrado una mayor preocupación que los hombres por el impacto de sus hábitos sobre el medio ambiente, además de saber reconocer mejor los peligros que supone una mala práctica de impresión. Igualmente, las mujeres son más proclives a adquirir productos de fabricantes que reciclan.
Además, el 71% de las mujeres se muestran culpables cuando desechan un dispositivo en vez de repararlo, frente al 63% de los hombres. El género femenino es también más consciente del gasto de papel: el 79% se siente culpable al imprimir páginas innecesarias, comparado con el 71% de los hombres.
Dos terceras partes se confunden en lo relativo al gasto de papel
La gran mayoría de encuestados (un 64%) creen erróneamente que la tinta y el tóner constituyen la principal amenaza para el medio ambiente en lo referente a la impresión.
No obstante, menos de la mitad de los usuarios (un 46%) entienden que, de hecho, el gasto en papel supone el mayor contaminante medioambiental. Este es el apartado que más formación e información requiere, con el fin de que los consumidores refuercen sus hábitos para contribuir hacia una mayor sostenibilidad.
Por su parte, el Análisis del Ciclo de Vida de Lexmark concluye que la mayoría de la contaminación medioambiental generada por una impresora se deriva del gasto en papel (47%), frente al 10% de contaminación que puede atribuirse al consumo energético y el 11% de los cartuchos de tinta. De manera similar, la mayoría de emisiones de CO2 tiene lugar durante la fase de uso de los equipos: 68% en el caso de impresoras multifunción de inyección de tinta.
Sobre el estudio
El estudio de Lexmark fue realizado por Ipsos entre el 12 de marzo y el 6 de abril de 2009. Se consultó a 10.507 personas en 21 países con edades a partir de 15 años que utilizan ordenador en su casa. Hubo al menos 500 entrevistas por país, abarcando muestras nacionales representativas para el objetivo del estudio y llevadas a cabo en: Austria, Canadá, Dinamarca, EE UU, Francia, Australia, Alemania, Brasil, Italia, China, Países Bajos, Méjico, Noruega, Rusia, Polonia, Sudáfrica, Rumanía, Turquía, España, Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Reino Unido.