El sector, en datos
El 23 de febrero, la Asociación de la Comunicación Gráfica (Neobis) presentó el Estudio Económico con los datos del sector gráfico, un informe anual que se realiza con la información del Registro Mercantil de todas las empresas del sector que son consideradas activas. Un año más el estudio se detiene en el CNAE 181, más propio del sector, y en el 172, correspondiente a manipulado de papel y cartón. Se presenta también información sobre los sectores de encuadernación, etiquetas, rotativa, libro color e impresión digital de gran formato. Estas son las conclusiones.
El sector se analiza desde el comportamiento de numerosos parámetros, a través de los cuales se detecta el liderazgo de no más del 15% de las empresas. Por una parte, los ratios de estas empresas deberían constituir el referente en las aspiraciones de las demás pero, por otra, también nos permite visualizar el claro camino hacia la concentración que el sector emprendió hace unos años.
Reducción de empresas e incremento de los ingresos
El número de empresas ha seguido descendiendo en toda España, principalmente en el segmento de las compañías cuyos ingresos no superan el medio millón de euros. En los dos últimos años se han depurado cerca de seiscientas empresas, de las cuales cuatrocientas desarrollaban su actividad en situación de quiebra técnica. Desgraciadamente no se puede dar por concluida la reestructuración del sector ya que restan aún un número considerable de empresas con dificultades que se nos antojan insuperables de cara al futuro.
Sin embargo, la facturación del sector se ha visto incrementada en un 3,25%, el tiempo dirá si detrás de este dato hay una verdadera recuperación o es consecuencia en 2015 de los numerosos procesos electorales que se produjeron. Desde luego la cantidad estimada que nos pudieron dejar los comicios se asemeja mucho a los más de 150 millones que se han incrementado los ingresos del sector.
Ambos factores, la reducción de empresas y el incremento de los ingresos, han propiciado que la facturación media por empresa crezca en más del 6% respecto del ejercicio anterior. En este sentido, se observa también un mayor protagonismo de las empresas de más facturación, que acumulan más del 75% de los ingresos.
Otro dato reseñable es el crecimiento por tercer año consecutivo de la afiliación de trabajadores en el sector. Según datos del Servicio Público Estatal de Empleo, la afiliación en el sector se ha incrementado en un 1,34% durante 2016, dato positivo pero inferior al 2,53% experimentado en 2015. A este último le corresponden los ingresos antes citados, lo que nos invita a ser cautelosos de cara a aventurar una recuperación sectorial sostenida.
También se ven afectados en positivo los resultados del ejercicio de 2015. El número de empresas con resultado en “números azules” vuelve a crecer un año más y esto tiene su reflejo en los valores absolutos que arroja el conjunto del sector. A la vez, el número de empresas con resultado negativo sigue decreciendo, ya sea como consecuencia del crecimiento sectorial o por la desaparición de las compañías que se encontraban en peor situación. De todas formas, es en las empresas de menor facturación donde se focalizan los peores resultados, pero no en todas las pequeñas. Tan es así, que es precisamente en las pequeñas empresas donde se encuentran los ratios supriores de rentabilidad que se dan en el sector. Es decir, hay negocios considerados pequeños que alcanzan porcentajes de beneficios que para sí los querrían las grandes empresas aunque, lógicamente, cuando se trata de valores absolutos, no pueden competir con las grandes compañías. Pero lo cierto es que a algunas empresas, hacerse pequeña, les ha salido muy rentable.
Baja el endeudamiento
Otro dato positivo es el endeudamiento medio, que baja por “enésimo” año consecutivo, en esta ocasión desciende 1,3 puntos hasta situarse en el 55,6%. Prácticamente baja en todos los subsectores, lo que nos indica que el sector está dedicado a pagar su deuda, pero también que las inversiones se realizan de forma más selectiva.
Este año se han presentado datos del EBITDA (Beneficios antes de intereses, impuestos y amortizaciones), arrojando datos muy dispares que nos han permitido evaluar y perfilar las características de los líderes y de los subsectores o productos que gozan de mejor salud.
El primer dato significativo es que no todas las grandes empresas están entre los líderes: el 30% de las empresas de más de 3 millones de euros de facturación no se encuentran entre las de mayor beneficio en términos absolutos.
Otro dato a destacar es que casi un 25% de las empresas no consiguen números positivos en el EBITDA, son pretendidos negocios que en realidad no lo son. En el futuro se verá si estas se reinventan, hacen operaciones colaborativas o desaparecen.
Las cifras por subsectores
Por subsectores, encontramos un panorama similar al del ejercicio precedente: los sectores de rotativa, libro color e impresión digital de gran formato, presentan pocas empresas, líderes muy claros, que aglutinan en torno al 80% de su facturación. Los subsectores de encuadernación y fabricación de etiquetas caminan hacia el mismo escenario. En encuadernación, 15 empresas facturan el 66% del conjunto. En etiquetas, 43 empresas acumulan el 78% de los ingresos del sector. En ambos casos se puede intuir que la tendencia hacia la concentración continuará. El sector de fabricación de etiquetas sigue siendo el que presenta los mejores ratios de todo el sector.
Conclusiones
A modo de conclusión, la asociación cree que hay razones para pensar que el “saneamiento” progresivo del sector, globalmente considerado, es evidente aunque insuficiente. En cualquier caso, hay que ser cautos al denominar como “saneamiento” a la reducción de empresas y, como consecuencia, la mejoría de las que permanecen. Lo cierto y verdad es que esta misma realidad es un dato positivo para los que permanecen pero negativo para los que desaparecen. Aunque analizando fríamente los números, los hechos son los que son y no se pueden cambiar, a juicio de Neobis, lo más correcto sería no actuar de forma insensible hacia las empresas que se van quedando en el camino. En ninguno de los casos es una buena noticia la depuración del sector, ya que esta espiral se sabe cómo y cuándo empezó pero no se sabe aún dónde ni cuándo acabará.