En pleno verano, también la Primera C130 trabaja ‘hasta sudar tinta’
En la Costa Azul, julio y agosto son los meses tradicionales de las vacaciones. Pero mientras decenas de miles de turistas disfrutan de unos días de descanso en las playas de la Riviera francesa, Yvain y Nicolas Joubert piensan en cualquier cosa menos en relajarse en la arena. Y es que, precisamente en pleno verano, es cuando las máquinas de imprimir y los sistemas de postimpresión funcionan a tope en esta imprenta de Niza dirigida por los dos hermanos Joubert. La empresa familiar, fundada en 1980 por su padre, Bernard Joubert, es desde hace 15 años una de las pocas imprentas francesas especializadas en un producto que se entrega poco antes de comenzar el nuevo año lectivo, a principios de septiembre.
Joubert Imprimeurs produce para alrededor de 1.100 institutos en toda Francia los anuarios escolares con los reglamentos, informaciones para los escolares, horarios de clase y cupones, con los que los profesores informan a los padres sobre la conducta de sus hijos o que los alumnos entregan en caso de enfermedad o para pedir dispensas de asistencia. El proceso de producción de los anuarios, que se imprimen generalmente en formato A5plus con una tirada anual superior al millón de ejemplares, es muy exigente: impresión a varias tintas, troquelados y, a menudo, con una cubierta plastificada. Todo esto supone un reto no solamente para las tres máquinas de impresión, sino también para la manipulación posterior.
Además, la tirada media por anuario escolar es de 880 ejemplares encuadernados con cuatro grapas para optimizar su resistencia. Es decir que Joubert Imprimeurs debe cambiar el formato de su embuchadora-cosedora con mucha frecuencia. El récord de un día está en 41 trabajos diferentes.
Antes, 8 personas a 3 turnos. Ahora, 5 personas a 1 turno
Tras trabajar 30 años con un modelo de otro fabricante, la empresa adquirió en la primavera de 2011 una embuchadora-cosedora Primera C130 de Müller Martini con seis marcadores de pila plana, marcador de tapas, apilador en cruz Apollo y pantalla de gran formato. Según Yvain Joubert, quien se encarga de manejar él mismo la Primera junto con otro maquinista, los resultados conseguidos desde entonces son asombrosos, tanto en lo que respecta a la productividad como también a la calidad.
“Antes de poner en servicio la Primera, teníamos ocho personas trabajando a tres turnos en la embuchadora-cosedora durante el período de más trabajo, en agosto. Ahora, con un volumen un poco mayor, necesitamos solamente cinco personas a un turno. Con la vieja encuadernadora teníamos diez reclamaciones de clientes a causa de defectos por cada 800 ejemplares; con la nueva máquina, hasta la fecha no hemos tenido ninguna”. No es de extrañar entonces que el sistema Asir 3 haya impresionado especialmente a Yvain Joubert, cuyos padre, abuelo y bisabuelo también fueron impresores: “Con tantos títulos y una velocidad de producción tan elevada, es muy importante contar con un sistema fiable de control de pliegos”.
En agosto, cuando además de los 24 empleados fijos se contrata a seis ayudantes, Joubert Imprimeurs factura el triple que en un mes normal, sólo con los anuarios escolares. En esta época del año, la empresa imprime otros productos solamente en casos excepcionales. Fuera de los meses punteros en el verano, Joubert Imprimeurs produce folletos, prospectos e impresos, sobre todo para clientes de la región, así como documentos para las autoridades, calendarios y prospectos para productos farmacéuticos. Las tiradas varían entre los 300 y 400.000 ejemplares, con una media de 5.000.
También para estos productos, la alta automatización de la nueva embuchadora-cosedora es ventajosa para Joubert Imprimeurs. “Pero, para ser franco, la Primera está casi sobredimensionada para estas producciones”, afirma Yvain Joubert. “En cambio, en nuestro período punta, necesitamos una máquina de alta capacidad, y por eso ya no podríamos trabajar sin la Primera, debido a que los plazos de entrega deben cumplirse exactamente en las fechas acordadas”.