Se detecta el primer caso español del virus de 'Schmallenberg' en una explotación cordobesa

A partir de ahí, la directora general de la Producción Agrícola y Ganadera, Judit Anda, trasladó la última hora acerca de este primer caso de virus de 'Schamallenberg' en España a los representantes de las organizaciones profesionales agrarias, de la Federación de Asociaciones de Defensa Sanitaria Ganadera y la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas Agrarias, en el encuentro del pasado 13 de marzo, en Sevilla.

El hecho se ha producido en una explotación mixta de ovino y caprino con un censo de 656 animales –644 ovinos y 12 caprinos–. El pasado día 6 de marzo se detectó un caso caso de aborto con malformaciones con síntomas clínicos de la enfermedad, según ha informado la Junta de Andalucía, a través de una nota, finalizada la reunión mantenida con Anda. Tras ponerlo en conocimiento de los servicios veterinarios oficiales, se tomaron muestras y se enviaron al Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid) del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, donde confirmaron el resultado positivo.

El Plan Especial de Vigilancia que se puso en marcha el pasado mes de enero, en el marco de Plan Andaluz de Vigilancia Epidemiológica, ha hecho posible la rápida detección del primer caso de esta enfermedad que ya ha causado estragos en varios países europeos. Además de esta medida de precaución, la Consejería ha incrementado las tareas de vigilancia, tal y como hizo saber Anda durante el encuentro del pasado día 13 en Sevilla. En el curso de la reunión, la directora pidió redoblar los esfuerzos y la colaboración entre el sector ganadero y los servicios veterinarios para así llevar a cabo una prevención más efectiva.

La enfermedad de 'Schmallenberg', se diagnosticó durante el pasado verano en Alemania y presenta una serie de síntomas clínicos poco específicos como fiebre, disminución del apetito, diarrea, pérdida de condición corporal y reducción de producción que parecen resolverse por sí mismos al cabo de dos o tres días. Los signos más habituales, y más preocupantes son abortos, mortalidad o malformaciones en los fetos.