Descubiertos los genes que causan la meningitis y la sepsis en cerdos
Jesús Arenas, profesor de la Universidad de Zaragoza e investigador del Instituto Agroalimentario de Aragón (IA2), ha descubierto los genes esenciales que utiliza el patógeno Streptococcus suis para causar meningitis y sepsis en cerdos. En concreto, ha identificado 361 genes esenciales para causar la infección y su estudio permitirá la creación de una nueva vacuna.
Esta investigación se ha desarrollado en el instituto Wageningen BioVeterinary Research (que forma parte de la Universidad de Wageningen, Holanda) con colaboraciones de la Universidad de Nijmegen (Holanda), y se ha finalizado en la Universidad de Zaragoza. Ha contado con financiación del proyecto europeo PIGSs, en el que además el microbiólogo molecular Jesús Arenas ha liderado un grupo de trabajo.
Streptococcus suis es un patógeno que causa meningitis, neumonía y sepsis en cerdos jóvenes que normalmente desemboca en muerte. Sus infecciones causan pérdidas económicas estimadas en 200.000 millones al año a nivel global. No existen vacunas efectivas para prevenir la infección, si bien se utilizan bacterinas, pero estas están limitadas a una determinada explotación y a una determinada cepa.
El tratamiento con antibióticos es lo más utilizado para prevenir y tratar las infecciones causadas por este patógeno. Su uso es extremo; en algunas granjas, cerca del 50% de los antibióticos son destinados a tratar las infecciones causadas por S. suis. No obstante, el desarrollo de numerosas resistencias a antibióticos y la presión social por reducir su uso está demandando nuevas alternativas para prevenir o tratar de forma más efectiva S. suis.
El trabajo de Arenas está dirigido a abordar este problema. Ha partido de la hipótesis de que aquellas estructuras que el patógeno necesite estrictamente para causar la infección serán buenos candidatos para generar nuevas terapias o vacunas. Bloquear estas estructuras impedirá el desarrollo de la infección. Esta bacteria vive en el medio ambiente y también como comensal, por tanto gran parte de sus genes están dedicados a funciones no relacionadas con su patogenicidad.