La Orquesta Sinfónica de Ottawa experimenta con la impresión 3D
El descubrimiento de aleaciones como el bronce y el latón permitió a los antiguos músicos ampliar las posibilidades de los aerófonos de cuerno y madera. La Revolución Industrial introdujo nuevos materiales y procesos de fabricación que ayudaron a rediseñar instrumentos como el piano, los metales y las maderas para que pudieran tocar más rápido y más fuerte. Y a medida que estas capacidades para dar forma al sonido han crecido y cambiado, también lo ha hecho la capacidad de expresión musical de los compositores. El experimento 3D StringTheory de la Ottawa Symphony Orchestra (OSO) explora cómo las nuevas tecnologías actuales, como la impresión en 3D, pueden ampliar aún más los límites musicales.
Para explorar las nuevas posibilidades creativas que la tecnología aporta a la música, la Orquesta Sinfónica de Ottawa encargó a la fabricante de violines de Ottawa Charline Dequincey, al diseñador de Creadditive Laurent Lacombe y al Centro Tecnológico Industrial de Winnipeg la creación de instrumentos de cuerda originales impresos en 3D. El compositor Harry Stafylakis ha escrito una pieza original inspirada en estos nuevos sonidos. El producto final de sus esfuerzos colectivos se materializo en una presentación en directo de la pieza de Stafylakis, con los nuevos instrumentos y la Orquesta Sinfónica de Ottawa, el pasado 4 de noviembre en el Salón Jean Pigott del Ayuntamiento de la capital canadiense.