La moto eléctrica Volta, diseñada utilizando la impresión 3D
Ànima Barcelona, el estudio de diseño industrial encargado de desarrollar la moto eléctrica Volta, optó por la impresora D profesional de sobremesa EntresD UP Box para el diseño y prototipado de algunas piezas. Con ella lograron reducir en más del 30% los costes de fabricación.
En el caso de la moto eléctrica Volta, la impresión 3D tuvo dos funciones principales en todo el proceso de diseño. Por un lado, se usó para la validación de los diseños, realizando impresiones funcionales de algunas partes de la moto como guardabarros, cofre portacasco, frontal del faro, cúpula y otras piezas para comprobar la ergonomía. Por otro lado, la impresión 3D también facilitó el desarrollo final y poder realizar por ejemplo versiones especiales, sin necesidad de invertir en moldes de plástico.
“Con la impresión 3D se pueden comprobar y validar los diseños antes de encargar los moldes de plástico para su fabricación. De esta manera disminuye la inversión en moldes, que generalmente supone casi la mitad del presupuesto del proceso de fabricación, que en el caso de la Volta han sido casi medio millón de euros”, comenta Diego Quiroga, CEO y fundador de Ànima Barcelona.
Con la impresión 3D se pueden imprimir prototipos completos y detectar posibles errores en más de un 30% antes de encargar los moldes. Antes de la llegada de la impresión 3D, los moldes se rectificaban posteriormente en procesos muy costosos para las empresas. En el caso de la moto eléctrica Volta, se construyó un prototipo completo impreso en 3D antes de encargar todos los moldes. Al probarlo se detectaron problemas de encaje que se solucionaron antes de encargar los moldes finales.
“Además de reducir costes, la impresión 3D también facilita la personalización, poder realizar piezas únicas para los clientes, sin necesidad de comprar moldes que no salen a cuenta en tiradas pequeñas. La impresión 3D democratiza la fabricación”, indica Quiroga.
Para la Volta se usó la impresión 3D para el prototipado de todas sus piezas. Las piezas más pequeñas, como la careta frontal del faro, el guardabarros y algunas piezas del battery pack, se utitizó la impresoras 3D de sobremesa profesional EntresD BOX. “La impresión 3D profesional de sobremesa actual pone al alcance de cualquier empresa la realización de prototipos precisos y más baratos. También permite que cualquier empresa pequeña pueda mejorar mucho el desarrollo de producto e ir haciendo correcciones para tener un buen producto final”, comenta Marc Torras, director general de EntresD”. “En EntresD estamos muy contentos de que una empresa puntera como Ànima Barcelona haya utilizado nuestra impresora EntresD UP BOX en el diseño y desarrollo de un producto tan innovador como la moto eléctrica Volta”.
Una apuesta por la moto eléctrica
Volta es un proyecto de Marc Barceló, ingeniero industrial con amplia experiencia en el sector de la automoción, que apostó por el proyecto de desarrollo de la EV.1, la primera moto eléctrica bajo la marca Volta. El diseño parte de la premisa de evolucionar hacia un modelo más sostenible sin renunciar al diseño o las prestaciones. Barceló, junto con el Instituto Europeo di Design (IED) y Ànima Barcelona, han sido los encargados de llevar a cabo el proyecto de final de carrera presentado por Guillem Galiano y Oliver Pecharromán, elegido de entre las muchas propuestas recibidas.
Superada la fase previa, el proyecto ha sido desarrollado entre el Departamento de Ingeniería de Volta, en el apartado mecánico, y Ànima Barcelona, en el apartado de carrocería y elementos de comunicación. Recientemente presentada bajo el nombre Volta BCN, concedido por el Ayuntamiento de Barcelona para los próximos 10 años, la Volta se comercializa desde octubre de 2015 con un gran éxito a nivel internacional en países como Holanda, Francia, Portugal, Alemania, Finlandia, entre otros. Con unos 70 kilómetros de autonomía, está disponible en dos modelos: el City y el Sport. También se ha desarrollado la versión SuperMotard, más deportiva.