Una exitosa unión
Recubrimientos de Poliéster S.A. (Reposa) es una empresa que a lo largo de su historia ha sabido reinventarse. Y esta afirmación, un lugar común en el mundo de la comunicación, es en este caso cierta. Si en sus inicios, 1988, su actividad se desarrollaba en Madrid, en la actualidad sus instalaciones centrales se ubican en la localidad leonesa de Villamañán. Y si a finales de la década de los 80 sus productos estaban destinados al sector ferroviario, a día de hoy, y desde 1996, sus tanques (principalmente de doble pared) para almacenar combustibles líquidos representan su negocio principal. En este tránsito de 32 años ha habido de todo, hasta un incendio que sufrió su factoría en marzo de 2013, un acontecimiento que, no podemos evitar el tópico, hizo que la compañía, ya por entonces unida a Lafon, resurgiera de sus cenizas como un Ave Fénix.
A pesar de la negativa opinión que solemos tener sobre ‘lo nuestro’ (compensado, es verdad, por un ombliguismo exacerbado, minoritario, pero muy intenso), en España existen empresas que han liderado sus respectivos sectores y han sido verdaderos líderes, un concepto este último que se utiliza con una elevada generosidad. Es el caso de Reposa y, también, de uno de sus principales clientes allá por los primeros noventa: Talgo. En el caso de nuestra protagonista, en 1996 patentó un tanque de doble pared elaborado con dos materiales, acero y poliéster, entre los que se instala un sistema de detección de fugas. Esta innovación conceptual y tecnológica es sobre la que la compañía basó su éxito inicial, que se ha mantenido durante estos años de actividad.
Agustín Parrado, director ejecutivo de Reposa-Lafon, explica que “Reposa, antes de unirse a Lafon en 1996, fue la apuesta de uno de sus socios, Luis Silva, fallecido en 2005”. En sus inicios la empresa fabricaba piezas de fibra para los interiores de vagones de tren, “como los módulos de los trenes de CAF o de Talgo”, tareas que se llevaban a cabo en Madrid. El hecho de que el primer gran contrato de Renfe para poner en marcha el AVE Madrid-Sevilla se adjudicara a la francesa Alstom y esa cualidad de Reposa que casi podría ser su lema, hacer de la necesidad virtud, propició que la compañía diera comienzo a la fabricación de tanques de poliéster para almacenar combustibles líquidos. Una decisión que se tomó tras la liberalización del mercado de distribución minoritaria de hidrocarburos. Parrado relata que “conseguimos entrar en un concurso para Repsol, y empezamos fabricando 20 depósitos de 5.000 litros a la semana, y desde entonces no hemos parado”.
El director ejecutivo de Reposa-Lafon afirma que alrededor del 50% de los depósitos de combustible que se instalan en España salen de la factoría de Villamañán. Los dos principales modelos son los de doble pared acero-acero y acero-poliéster. Los primeros se instalan al aire libre, depósitos aéreos, mientras que los segundos se entierran, depósitos enterrados.
Esa especialización, esa experiencia y la aplicación de las mejores tecnologías, sumadas al saber hacer de los profesionales de Reposa-Lafon, permitieron a la compañía comercializar durante el pasado año tanques que en conjunto sumaron 25 millones de litros de capacidad de almacenamiento.
Inquietudes comunes
María Jesús Marcos, Chus, como es conocida en la empresa, es administradora y accionista de Reposa-Lafon, recuerda cómo en 1996 “no existía una normativa para homologar los tanques que fabricábamos y por más que buscamos, a nivel nacional y europeo, no logramos encontrarla, por lo que, adelantándonos a nuestro tiempo, decidimos desarrollar junto a un equipo de expertos de AENOR la normativa española”. Esta decisión, “fue todo un acierto, nos ayudó a cerrar nuestro posterior acuerdo con Lafon Francia”.
La unión de la compañía española y la multinacional gala se produjo, como señala Parrado, durante una larga negociación en la que coincidieron sendos y complementarios intereses. Lafon “buscaba una fábrica en España y nosotros queríamos ampliar nuestra solvencia para seguir creciendo en el mercado. En 1996, tras casi un año de conversaciones, arrancamos con la joint venture que mantenemos desde entonces: Reposa-Lafon. Dos años después se inauguraron oficialmente las actuales instalaciones de la empresa”.
Chus Marcos trufa aquellos momentos con algún detalle. “Los franceses querían comprar la patente, pero Luis Silva no quiso venderla. Ellos insistieron mucho y en diez días, después de nuestro primer encuentro en la Feria de Estaciones de Servicio de Barcelona, se presentaron en nuestra empresa para buscar un posible acuerdo. Después de varias negociaciones se creó la alianza entre Lafon, especializada en la fabricación de tanques de acero, y Reposa, especialista en la elaboración de tanques de poliéster”.
Los cambios a nivel empresarial han continuado durante este siglo XXI, puesto que en 2006 Reposa-Lafon se integró en Madic Group, que había adquirido Lafon, otra operación que permitió afianzar aún más la solvencia de la compañía española.
El calado de la ITC MP 04
Parrado, quien confirma que en la actualidad se están poniendo en marcha muchas estaciones de servicio, señala que antes de 2040 todos los tanques de almacenamiento de combustibles deberán ser de doble pared, tal y como se recoge en la ITC MP 04, una norma cuya aplicación supondrá una actualización en términos de seguridad y de protección medioambiental en el sector nacional de las estaciones de servicio.
La relevancia de esta instrucción técnica, que afecta a multitud de proveedores, incrementa las exigencias de productos y técnicas aplicadas, y favorece el desarrollo tecnológico, es destacada por Rosa Sánchez, directora de Bequinor, quien glosa la labor del director ejecutivo de Reposa-Lafon, con cuya “gran aportación siempre hemos podido contar. Ha colaborado con Bequinor a nivel técnico compartiendo muchos conocimientos, experiencia y coherencia. Tres de los principios con los que podría definir a Agustín Parrado”.
En cuanto a la factoría de Reposa-Lafon, Sánchez llama la atención sobre sus dimensiones y también sobre las labores que en ella se desarrollan. “Lo primero que me llamó la atención cuando la visité fue la organización para llevar a cabo todos los procesos de fabricación”. La directora de Bequinor hace hincapié en el cuidado que se presta en todas las fases de fabricación a los requisitos fijados en la mencionada instrucción técnica.
En cuanto al futuro de la compañía, el director ejecutivo de Reposa-Lafon, considera que “a corto plazo, nos seguiremos manteniendo con una producción constante y estamos trabajando para no perder el ritmo en el medio y largo plazo”. Parrado continúa y apunta que “quizás las energías alternativas nos abran nuevos caminos en los que Reposa-Lafon continúe en el grupo de cabeza. Sin duda, la futura sostenibilidad energética será un nuevo reto al que tendremos que enfrentarnos”.
María Jesús Marcos afirma que “siempre hemos hecho frente a los cambios, y en la actualidad, con la incorporación de las nuevas tecnologías, podemos decir que no vivimos una época de cambios, sino un cambio de época. Siempre he sido una persona muy optimista y creo que seguiremos adaptándonos a los nuevos retos que se vislumbran, como puede ser el aumento de las energías alternativa aplicadas a la movilidad”.
Los instaladores, fieles socios de Reposa-Lafon
Reposa-Lafon cuenta con fieles clientes que están convencidos de la excelencia de los tanques fabricados con la compañía de Villamañán. Como es lógico, uno de los principales destinatarios de los depósitos es Madic Iberia, cuyo director de Operaciones, José Amo, señala que, desde su creación e inclusión en Madic Group, su filial de la francesa en el mercado ibérico adquiere los depósitos a Reposa-Lafon para todas las instalaciones que realiza, “más de 100 en 2019”.
Amo destaca la calidad de las realizaciones de Reposa-Lafon y el servicio prestado por los profesionales de la compañía. Y pone el acento en la flexibilidad con la que la compañía se adapta a las necesidades de cada intervención, realizando las modificaciones necesarias para adaptarse a cada instalación.
Juan Antonio Hernández, de JHC Instalaciones, declara que “llevamos más de 45 años en este mundo. Y aunque hemos probado otros fabricantes de tanques, desde que establecimos relaciones comerciales con Lafon y probamos los depósitos de Reposa-Lafon no hemos vuelto a cambiar. Son los mejores; no dan problemas. Es posible que haya otros fabricantes que sean más baratos, pero no cuentan con la calidad que tienen los de Reposa-Lafon”. Pero la satisfacción de la compañía instaladora murciana va más allá. “La atención y la relación que tenemos con ellos es fantástica, de verdad. Nos sentimos muy apoyados en todos los sentidos, tanto en el servicio como en la seguridad. Siempre nos asesoran de una manera muy clara con todo lo que debemos hacer a la hora de instalar y mantener un tanque o un depósito de combustible”.
“Para nosotros sólo hay dos tanques: los aéreos de acero-acero y los enterrados de acero-fibra, y ambos son de Reposa-Lafon”, apostilla Hernández, quien añade que “nosotros, antes que llevar a cabo una reconversión de una capa a doble capa, recomendamos comprar tanques de doble capa nuevos conforme a la normativa”.
El gerente de Servi-Star 2000, Gaietá Delgado, señala que la empresa ilerdense acumula ya “más de 22 años de experiencia en el sector, y desde hace 20 sólo compramos los tanques y depósitos a Reposa-Lafon, por calidad y por la excelente relación profesional que mantenemos con su director ejecutivo, Agustín Parrado, y con el Departamento Comercial de Lafon.”
“Cumplen sobradamente y son muy rigurosos con la normativa, en especial con las recomendaciones sobre los tanques de doble pared y los sistemas de detección de fugas”, continúa Delgado, quien agrega que “en el mercado hay empresas que convierten tanques de una pared a doble pared que tienen sistemas que están funcionando relativamente bien, pero son más caros que comprar un tanque nuevo de doble pared”.
“Sin embargo”, remarca el gerente de Servi-Star 2000, “donde Reposa-Lafon es más competitiva es en la primera inversión, dado que el coste de hacer la obra civil que supone sustituir un tanque por otro es mucho más elevado que la diferencia de precio de una conversión de simple a doble pared. No obstante, a la larga merece la pena por la durabilidad de un tanque nuevo. Nosotros siempre recomendamos comprar tanques unos nuevos, y si son de Reposa-Lafon, mejor.”
“Una empresa que deja de mirar al futuro deja de avanzar. Aunque ahora vivamos un presente solvente, trabajamos para que el futuro también lo sea”, afirma Agustín Parrado