RECI avanza con éxito en el objetivo de lograr una gestión más inteligente de las ciudades
Con menos de un año de vida, la Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI), una iniciativa nacional que es única en todo el mundo, ha conseguido atraer ya a 29 ciudades de nuestro país, aunque como señalaba su propio presidente, Íñigo de la Serna, hay varios municipios más que han solicitado su incorporación a lo largo de los últimos meses y que están a la espera de la aprobación necesaria de la Junta Directiva. Se confirma así la buena acogida de esta Red que nació con el objetivo de intercambiar experiencias y trabajar conjuntamente para desarrollar un modelo de gestión sostenible y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
“En esta nueva jornada hemos querido huir de objetivos protocolarios, hemos buscado que todas las exposiciones tengan una aplicación práctica, compartiendo proyectos que se puedan implantar con facilidad en los diferentes ayuntamientos. El objetivo final es crear un gran bloque a través de RECI que permita mejorar la competitividad de nuestro país”, señalaba Íñigo de la Serna.
Para ello este IV Comité Técnico ha incorporado, como una de sus principales novedades, una mayor participación del sector privado, abriendo a las empresas las puertas de RECI para que ellas mismas pudieran aportar su visión sobre las smart cities y encontrar nuevas fórmulas de colaboración público-privada con las que implementar las nuevas tecnologías en el ámbito urbano.
“RECI nos permite conocer experiencias de otras ciudades que han tenido resultados positivos y que pueden ayudar a solventar los problemas que también existen en otros municipios. La información es básica a la hora de tomar decisiones y si esa información se refiere a proyectos que se están implantando con éxito, resulta aún de mayor utilidad para lograr resultados”, indicaba Ignacio García de Vinuesa, para quien la Red Española de Ciudades Inteligentes no sólo resulta muy útil en la aplicación de nuevas tecnologías sino también en un aspecto básico como es la gestión inteligente de las ciudades.
“En un momento de convulsión social, en el que los ciudadanos reclaman modificaciones en las tareas administrativas, no basta con medidas legislativas como la emprendida por el Estado a través de su reforma de la Administración, sino que jornadas como ésta, en la que se comparten experiencias, también ayudan a lograr ese objetivo”, concluía el alcalde de Alcobendas.
Áreas de trabajo
En el área de Movilidad urbana cabe destacar la elaboración de un protocolo para garantizar la interoperabilidad de los puntos de recarga del vehículo eléctrico; se han dado los primeros pasos para la creación de lo que será el ‘Distintivo RECI de vehículo eléctrico’, que permitirá unificar todos los sistemas de pago de recarga, información y comunicación, ajustándose al estándar europeo OCCP; se está desarrollando, con el apoyo de la Fundación Instituto Tecnológico para la Seguridad del Automóvil (Fitsa), una plataforma que coordine la intervención de los diferentes gestores de carga y unifique las condiciones de prestación del servicio; y se ha puesto a disposición de la Red de forma gratuita durante un año la solución eCarga diseñada por Telefónica y Atos para el Plan Movele impulsado por el IDAE.
Por otra parte, este grupo de trabajo está participando en el recientemente creado Comité Técnico de Normalización de Aenor para las ciudades inteligentes (AEN/CTN 178), liderando Valladolid el subcomité de Gobierno y Movilidad; y también en el proyecto ‘Mi Ciudad Inteligente’, que cuenta con la colaboración de la FEMP, que durante los meses de mayo y junio recorrerá todas las ciudades miembros de RECI para divulgar el concepto de smart city entre la ciudadanía.
En el área de Gobierno, economía y negocios, se ha elaborado un amplio repositorio de ordenanzas y modelos de Administración electrónica de diferentes ciudades de la Red; se han analizado diferentes servicios de autenticación y certificación para identificar los que mejor se adaptan a la realidad municipal; y se ha puesto a disposición de la RECI la solución de Realidad Aumentada desarrollada por Valencia y la solución de subasta electrónica del Ayuntamiento de Santander. Por otro lado, se ha elaborado un documento que analiza diversos casos de implantación de tarjetas inteligentes en España y sus sistemas de gestión asociados, que sirve de referencia para aquellos municipios que quieran implantar una tarjeta ciudadana.
Finalmente, se ha decidido incluir como línea estratégica la temática de infraestructuras, tanto en cuanto a su modelo de gestión como de despliegue. En este sentido, el Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid ha aportado extensa documentación acerca de su experiencia, y se ha comenzado a debatir sobre la nueva Ley de Telecomunicaciones, actualmente en fase de anteproyecto.
En el área de Innovación social se ha determinado como línea de acción prioritaria el Open Government, y en concreto, el desarrollo de una guía normativa (ordenanza tipo) en el ámbito de la transparencia, el acceso y la reutilización de la información en los ayuntamientos. Como paso previo a su redacción se ha elaborado un estudio del estado del arte legislativo y buenas prácticas en este ámbito, con el fin de facilitar una visión global de la situación actual y el marco normativo existente. Y se ha diseñado un cuestionario sobre los ámbitos que debe contener la guía normativa, para su posterior estudio y debate.
En el área de Medio ambiente, infraestructuras y habitabilidad urbana, se han centrado en la puesta en común de experiencias y desarrollos de las diferentes ciudades para detectar problemas comunes e identificar soluciones ya testadas, y en la exposición de ejemplos concretos, a modo de caso de éxito. Así, el Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid ha expuesto todos los servicios que centraliza su plataforma de gestión, y el de Santander ha informado de los requerimientos necesarios para incluir una ‘cláusula de innovación’ en el contrato de gestión de residuos. También se ha seguido avanzando en la elaboración de fichas sobre el modelo de gestión de cada ciudad para poder evaluar sus resultados y ponerlos en común.
Del mismo, en el área de Energía se ha avanzado también en las fichas de actuaciones o proyectos de cada ciudad; en el intercambio de información y recursos (pliegos, ordenanzas, normativa autonómica, guías para mejorar la eficiencia energética); y en la identificación de casos de éxito y buenas prácticas (como las infraestructuras de control y gestión energética de Rivas-Vaciamadrid) para ahorrar tiempo, dinero y esfuerzo a los ayuntamientos. Finalmente, Santander ha puesto a disposición de RECI todo su conocimiento respecto a la adjudicación de ayudas a fondo perdido del Banco Europeo de Inversiones para realizar auditorías de eficiencia energética y sacar a concurso los servicios energéticos.
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