Superando al plástico convencional
Las fundas de cartón, en lugar de los envoltorios retráctiles tradicionales, pueden ayudar a envolver bandejas, tarrinas y tarros de comida, ya sea individualmente o en una variedad de configuraciones de paquetes múltiples.
Mientras los plásticos tradicionales pierden su atractivo debido a su escasa reciclabilidad, las empresas buscan alternativas que puedan reciclarse fácilmente, que supongan una menor carga para el medio ambiente y que contribuyan al concepto de economía circular. La presión legislativa se suma a este cambio: la UE, por ejemplo, ya impone un impuesto al plástico no reciclado desde 20211. En otros países, como Estados Unidos, las prohibiciones estatales de uso de otros materiales no reciclables están contribuyendo en su justa medida a la reorientación general. 2
El papel y los monomateriales van en aumento
Además de los requisitos legales, los cambios en las expectativas de los consumidores también son un importante motor de cambio. Una encuesta realizada entre los consumidores estadounidenses he revelado que alrededor de dos tercios de ellos consideran que el cartón, el papel y el vidrio son muy sostenibles, y muestran un gran interés por los plásticos reciclables y las alternativas basadas en fibras. 3
Envasado de productos: resisten la humedad y el peso del producto
Por ejemplo, los productos frescos. Las marcas de productos suelen confiar en los envases tipo concha de plástico, las bandejas de poliestireno y las bolsas de plástico para las bayas, las uvas, los tomates y otros productos similares, que se cargan y luego se cierran o se envasan de forma continua. Su envasado debe ser a prueba de humedad, ya que los productos suelen venir maduros y recién cosechados de los campos o huertos y se mantienen frescos con un dispensador de espray en el estante.
Aunque a primera vista el papel no parezca un material adecuado, muchas aplicaciones en campo demuestran que el cartón está ganando terreno también en la sección de productos frescos. Sin embargo, la sustitución de los estilos de envasado tradicionales por cajas de cartón de carga superior o por fundas requiere algunas adaptaciones específicas, especialmente en el caso de los productos húmedos. Por lo tanto, el cartón debe contar con un revestimiento de barrera para resistir la humedad. Este es el caso de los últimos avances en materia de envases de cartón. Además, los productos de tamaño medio o grande, como las manzanas, las cebollas y las patatas, suelen venderse a granel, ya sea por piezas o en bolsas flexibles que pueden contener varios kilos cada una. Al cambiar a las cajas o fundas de cartón, las empresas productoras deben asegurarse de que estas alternativas sean tan estables como los estilos de envasado tradicionales. Dependiendo de la carga, las cajas de estilo encolado o estilo cerrado proporcionan la estabilidad necesaria para manipular con seguridad productos de alta calidad.
Los productos como las fresas y las cebollas pueden envasarse de forma igual de segura en cajas de cartón que en envases tipo concha de plástico, bandejas de poliestireno o bolsas de plástico.
"Poner en marcha nuevos estilos de envasado y adaptarse a las tendencias actuales requiere que los equipos cuenten con la flexibilidad adecuada", afirma Robert Kiely, director general de Kliklok en Bristol, Reino Unido. Como pionero en el conformado y la carga de cajas de cartón, Syntegon lleva 75 años perfeccionando sus equipos. Syntegon ofrece una amplia cartera de soluciones de adaptación bajo su marca Kliklok, y presta su apoyo a los fabricantes de alimentos de todo el mundo para que cumplan con sus exigencias de sostenibilidad.
Cajas de cartón para cebollas australianas
La formadora de carga superior Kliklok ACE era la más adecuada para realizar este estilo, ya que puede conformar cajas de estilo cerrado y de estilo encolado en la misma máquina, ofreciendo al fabricante una flexibilidad total para futuros proyectos. Para reforzar los esfuerzos de sostenibilidad de los clientes, Syntegon ha desarrollado la ACE para trabajar con cartón o material corrugado. La Kliklok Vari-Right, a su vez, sirve de ayuda al cliente para el cierre de las cajas. Mantener la forma de las cajas de cartón mientras pasan por la máquina resultó un reto, ya que el cartón reciclado es más fino y menos rígido que la mayoría de los otros cartones. Sin embargo, el sistema de lengüetas de la cerradora de carga superior ayuda a guiar con seguridad las cajas a través de las distintas estaciones de cierre, mientras que los rodillos garantizan un sellado hermético con cola.
Envasado de gelatina: fácil colocación de las fundas
Mientras que los proveedores de productos están optando recientemente por envases más sostenibles, otras industrias ya empezaron a explorar estas opciones en una fase más temprana, y ahora las utilizan de modo extensivo. Los sectores de los aperitivos, las bebidas y los productos domésticos fabrican productos con una fuerte presencia en los estantes, lo que ofrece a las marcas la oportunidad de utilizar los diseños de los envases y las marcas atractivas para atraer de forma importante la atención de los consumidores.
Aprovechar este potencial implica un cambio en el material de envasado y en los propios sistemas de envasado. «Independientemente de la industria, nuestras máquinas pueden trabajar con diferentes materiales para manejar una gran variedad de estilos de envases, incluyendo cajas de cartón de carga superior y envases envolventes de cartón», señala Robert Kiely. Estos estilos de envase llamaron la atención de un importante fabricante de gelatinas: «Suministran a los supermercados de todo el Reino Unido. Por razones de sostenibilidad, querían cambiar su material retráctil de plástico para tres tamaños diferentes de tarros, desde el plástico de un solo uso a las fundas de cartón», explica.
Para cumplir este requisito, se optó por una Kliklok Certiwrap C150 para enfundar bandejas, frascos y tarros de alimentos, tanto individualmente como en una variedad de configuraciones de paquetes múltiples. La máquina forma un funda con una característica especial de retención en forma de V en su interior. Ayuda a espaciar y retener correctamente el tarro, cuya tapa pasa por la parte superior de la funda para mayor estabilidad. A continuación, la funda se sella con adhesivo. En lugar de aplicar dos bandas de cola en ambos extremos de una típica caja de cartón de carga lateral, las fundas solo requieren una, lo que ayuda no solo a sustituir el plástico con este estilo de envase, sino también a reducir los costes de adhesivo en un 50% aproximadamente.
La industria de las galletas y los crackers ha encontrado una alternativa viable a las bandejas de PET con las bandejas de cartón y la película de envoltura continua reciclable.
Envasado de galletas: replanteando las bandejas
Otra industria interesada en sustituir el plástico tradicional es el sector de las galletas y los crackers, que lleva décadas utilizando bandejas de plástico. Las bandejas se cargan con galletas, luego se envuelven en envolturas continuas y, a veces, se cargan en cajas de cartón, especialmente si la envoltura continua solo asegura la protección de la barrera atmosférica y no sirve para ningún propósito de marketing. No obstante, en términos de sostenibilidad, las bandejas de plástico fabricadas con tereftalato de polietileno, o PET, se están poniendo en cuestión, ya que son difíciles de reciclar, aunque no por razones técnicas. Aunque existen la tecnología y las instalaciones adecuadas para ello, todavía no existe un sistema aceptable y rentable que permita recoger, clasificar, reciclar y reintroducir las bandejas de PET en la cadena de valor, lo que hace que sean en gran medida irreciclables desde una perspectiva práctica.4
Muchos fabricantes de galletas están considerando la posibilidad de utilizar bandejas de cartón y película de envoltura continua reciclable. Según una encuesta realizada por Syntegon junto con la organización industrial Biscuit People, los productores de galletas, bizcochos y productos de panadería muestran un gran interés por las envolturas continuas en bandejas de papel o con películas monomateriales. Más de la mitad de los encuestados prefieren una solución integrada para alcanzar sus objetivos de envasado sostenible.
Esto permite a los fabricantes sustituir las bandejas de plástico convencionales para galletas o barritas por bandejas de cartón ecológicas. Respaldada por una envasadora continua Syntegon que puede procesar materiales convencionales, así como monomateriales o papel, la ACE puede contribuir así a lograr un sistema de equipamiento eficaz e integrado para operaciones de envasado sostenibles. Una cosa es segura: las empresas, al igual que sus consumidores, están deseosas de conocer más sobre los envases sostenibles, un ámbito que todavía está al principio de un largo y fructífero viaje.
