Francisco Oller compra Uprodeco por 1,8 M€
Francisco Oller, empresa de fabricación de tapones para vinos espumosos fundada en Cassà de la Selva (Girona) en 1892, ha culminado recientemente la adquisición de la unidad productiva Uprodeco, dedicada a la fabricación y tratamiento de granulado de corcho. Las gestiones, que se iniciaron hace más de un año, culminaron el pasado mes de noviembre con la firma de la escritura de compra-venta por parte de los representantes de Uprodeco y de Joan Puig, director general de Oller.
Uprodeco se ubica en el Polígono El Trust de Cassà de la Selva, con una extensión de 28.000 metros cuadrados y con un molino con capacidad para triturar hasta 9.000 toneladas de corcho al año. La propuesta de Oller, más allá de los 1,8 millones de euros iniciales, incluye el mantenimiento de los puestos de trabajo y la continuidad del negocio.
Se añade el hecho histórico que Oller fue una de las empresas fundadoras de Uprodeco ahora hace 64 años, y años después, Oller vuelve a asumir la responsabilidad de tirar adelante el proyecto Uprodeco.
“Se abre una etapa importante para Oller, pero también para el corcho catalán” ha explicado el director general de la compañía, Joan Puig. “Nuestra responsabilidad a partir de ahora pasa por producir productos de la más alta calidad, pero también por velar por la regeneración de los alcornocales catalanes. Por este motivo apostamos por un proyecto que mejorará la gestión de estos bosques y su explotación en Cataluña”.
Por su parte, Jaume Nadal, presidente del grupo Oller, se muestra confiado en los buenos resultados de la explotación del refugo del corcho y apuesta por “seguir trabajando con el máximo compromiso con el país, con el territorio, con la calidad del producto, con nuestros trabajadores y con los clientes de la empresa, porque esta implicación es la clave de nuestro éxito”. El presidente añade que “con esta adquisición culmina de alguna forma la idea de empresa que construyó mi bisabuelo, una aventura personal apasionante que se acabó convirtiendo en una entusiasta búsqueda de la excelencia que perdura hasta nuestros días y que se fundamenta en el hecho de estar presente directamente en todas las fases de fabricación del tapón de corcho para asegurar la máxima calidad del producto”.