Siemens moderniza una línea ferroviaria en Turquía
Siemens suministrará tecnología de señalización de última generación para la ruta ferroviaria principal que cubre los 380 kilómetros que separan Samsun de Kalin. Dicha ruta conecta el puerto de la ciudad turca de Samsun, a orillas del mar Negro, con el nudo ferroviario de Kalin, en la región de Anatolia Central. Gracias a la modernización de los equipos de señalización, la velocidad máxima pasará de 70 a 120 km/h, con lo que la duración del trayecto se reducirá a cinco horas en lugar de las nueve actuales. Se prevé que la ruta entrará en servicio en 2017.
Siemens suministrará los sistemas de enclavamiento electrónico Trackguard Westrace, los accionamientos de agujas, las tecnologías de paso a nivel y de comunicación y el sistema de control de trenes ETCS (European Train Control System) de Nivel 1 de la ruta, que presta servicio a 31 estaciones. El contrato incluye también el equipamiento para el centro de control de operaciones de Samsun. Siemens ya ha tenido la oportunidad de equipar varias rutas en Turquía con tecnología de señalización y de control de maniobras durante los últimos años. Un ejemplo sería la línea 1 del metro de Estambul. Siemens también se encargó de automatizar la ampliación de la línea hasta un total de 25 km, así como de su puesta en servicio en el año 2012. En el ámbito de las vías de transporte principales, Siemens suministra la tecnología de señalización ETCS del tramo que va de Bandirma a Menemen, así como de una de las líneas de alta velocidad más importantes de Turquía, que cubre el trayecto entre el polo industrial de Konya y la capital del país, Ankara. Siemens también ha sido el encargado de suministrar las tecnologías de señalización y control para el túnel de Marmaray, abierto en 2013, y que representa el colofón de uno de los proyectos de infraestructura de transporte de mayor envergadura de todo el mundo. Dicho túnel discurre por debajo del Bósforo y conecta las líneas ferroviarias que se encuentran en el lado europeo de Estambul con las del lado asiático.
La red ferroviaria turca, con sus más de 10.000 kilómetros de vía, presta servicio a unos 150 millones de pasajeros anuales. Menos de un 10% de la red cuenta con vías dobles. Por este motivo, Turquía pretende reforzar la inversión en sus líneas para impulsar los sectores del transporte y la logística. Proyectos como el de Marmaray, así como los de ampliación de varias líneas de alta velocidad y de modernización de las estaciones ferroviarias, dan buena cuenta de los objetivos tangibles que la compañía ferroviaria turca ha establecido para los próximos años. El plan quinquenal incluye la ampliación de la red de trenes convencional, que pasará de los 8.770 a los 10.556 kilómetros, y también de la red de alta velocidad, que pasará de los 888 a los 2.496 kilómetros para 2018. Este proyecto representa una inversión de unos 20.000 millones de euros destinados a la construcción y a la adquisición de tecnología ferroviaria.