El SAI consolida las necesidades de la Administración Pública
La búsqueda de un mayor grado de seguridad, rendimiento y eficiencia en el tratamiento de los datos y la atención a los ciudadanos abarca a las empresas, públicas y privadas, y a la Administración Pública. Este sector se viene marcando una serie de objetivos recogidos bajo el concepto de Transformación Digital, y debe contar con una infraestructura sin ningún paro.
Para conseguir metas, como simplificar las gestiones a la ciudadanía, es preciso digitalizar los procesos y exige actualizar el extenso parque de equipos informáticos y centros de procesamiento de datos repartidos por múltiples instalaciones para convertir todos estos activos en una infraestructura consolidada y segura, que reduzca asimismo el consumo de energía. Por lo que se refiere en concreto a la seguridad, se puede contemplar desde varios puntos de vista, como la ciberseguridad con el fin de proteger la confidencialidad de los datos y la seguridad energética para mantener una infraestructura tan completa y crítica en funcionamiento ante cualquier circunstancia.
La continuidad del servicio es clave
Los Sistemas de Alimentación Ininterrumpida son imprescindibles para que las administraciones públicas ofrezcan el grado de protección necesario frente a las numerosas perturbaciones eléctricas que pueden acarrear consecuencias muy graves para ciudadanos, empleados, proveedores y empresas colaboradoras. La mejor manera de evitar estos daños potenciales pasa por garantizar la continuidad del servicio, y los SAI/UPS son los equipos más adecuados para lograrlo.
Su adquisición e instalación representan un coste muy pequeño dentro de la inversión total, pero su aportación es decisiva para impedir interrupciones del servicio y pérdidas de datos. La idoneidad de un SAI/UPS para las infraestructuras de las administraciones públicas, tanto en coste como en prestaciones, se basa en características como su escalabilidad, redundancia y flexibilidad. En otras palabras, se adapta a los requisitos concretos de cada entorno y asume el crecimiento futuro de la capacidad, todo ello con un funcionamiento fiable a un coste económico.
Las perturbaciones que pueden afectar gravemente a los centros públicos son muy variadas, porque la señal suministrada por la red eléctrica dista de ser ideal. Además, los innumerables equipos informáticos y dispositivos electrónicos conectados a la red eléctrica son especialmente sensibles a estas perturbaciones, que van desde subtensiones y sobretensiones hasta cortes y microcortes, oscilaciones de tensión, armónicos y fluctuaciones de frecuencia. La gravedad de los efectos de tales alteraciones es tal que, según las estimaciones realizadas, un 50% de las pérdidas de información se deben a interrupciones y perturbaciones en el suministro de la red eléctrica.
Se ha mencionado antes que la reducción del consumo de energía también es una creciente exigencia en la de la implementación y modernización de las administraciones públicas. En este sentido, Salicru ha desarrollado su programa SLC Greenergy Solution, que abarca equipos caracterizados por su elevada eficiencia energética, la incorporación de más del 80% de materiales reciclables, la posibilidad de priorizar las salidas en función de las cargas más críticas y prestaciones orientadas a la eficiencia energética como el Eco-mode, con prestaciones avanzadas como IoT para monitorizar y parametrizar, modulabilidad opcional y distintos formatos físicos para adaptarse a los espacios.