La Pera de Lleida ya tiene el registro definitivo europeo como D.O.P.
15 de marzo de 2011
En este sentido, el Consell Regulador presentó a la Comisión un amplio dossier técnico en el que se demostraban las diferencias organolépticas, de forma y de color de las peras cultivadas en la zona protegida, entre las que destacaba el dulzor de las peras de Lleida que las diferenciaba del resto de peras producidas en el estado español y en el resto de Europa.
El dulzor de la pera de Lleida se debe a múltiples condiciones a las que está sometido el cultivo de la zona. El ámbito geográfico de la D.O.P. Pera de Lleida es una zona con más estrés térmico e hídrico y con temperaturas más elevadas, con más horas de insolación y una pluviometría muy baja que, junto a la tipología de los suelos (poco profundos y finos), confieren al cultivo más capacidad para sintetizar los azúcares. También la posición más meridional de la zona hace que el fruto destaque por su redondez y que la proximidad al litoral Mediterráneo dé una coloración más suave a las peras.
Este registro definitivo representa la culminación de un proceso que se inició el año 2004 y que buscaba destacar las cualidades diferenciales de la producción de peras de Lleida frente al resto e identificar esta calidad superior en el punto de venta, trasladando la información al consumidor. El largo proceso de reconocimiento ha estado marcado por un cambio de legislación en el 2006 y tiene su primer logro en el año 2008 con el reconocimiento provisional del distintivo D.O.P. Pera de Lleida, que permitió su inicio de comercialización en el territorio español.