Las plataformas de Hune en el río Ebro
29 de mayo de 2008
Este ambicioso proyecto convertirá en navegable el río Ebro a su paso por Zaragoza, lo que posibilitará sus usos lúdicos y deportivos durante todo el año. Un paseo peatonal, zonas verdes y equipamientos complementara las obras del azud del Ebro, en las que trabajan las plataformas elevadoras de Hune .
El proyecto, que se ha diseñado siguiendo criterios medioambientales, consiste en la construcción de una presa a la altura de Vadorrey que regulará el caudal del río y pacificará sus aguas en un tramo de 3,8 kilómetros. Esto hará posible que el Ebro sea navegable durante todo el año y constituirá un atractivo añadido a Expo Zaragoza 2008, que se celebrará en la capital aragonesa del 14 de junio al 14 de septiembre con el agua como elemento central de la muestra.
En la parte superior del azud, una pasarela peatonal de unos 216 metros de largo conectará ambos márgenes del río y dará continuidad al entramado urbano de la ciudad. Además, junto a la presa está previsto construir un embarcadero desde donde saldrán los barcos hacia el recinto de la Expo, que serán los primeros de España que funcionen con energía solar. Un edificio de servicios bioclimático, zonas verdes y equipamientos son algunas de las infraestructuras que se crearán en los alrededores del azud del Ebro.
La División de Plataformas Elevadoras de Hune ha servido hasta el momento varias plataformas articuladas y de tijera de entre 10 y 20 metros de altura para esta infraestructura tan importante como complicada, en la que la fuerza de las máquinas se mide con la del caudal del río. Las obras del azud se desarrollan en dos fases, y en ambas han estado presentes las plataformas de Hune, que trabajan desde hace aproximadamente un año en el proyecto. Una parte importante de su actuación se basa en la construcción del paseo peatonal sobre la presa, en el que la altura de las plataformas está jugando un papel fundamental.
Las plataformas han llevado a cabo las tareas de cerramiento de la pasarela. Además, se han utilizado para la instalación de las seis grandes compuertas metálicas de la presa, que serán las encargadas de regular el caudal del río mediante su apertura y cierre. La robustez de las plataformas de Hune, unida a la seguridad que ofrecen, son sólo algunas de las ventajas que están aportando las máquinas para asegurar el éxito del proyecto.
Las obras del azud del Ebro han requerido el trabajo en negativo de dos plataformas telescópicas de 15 y 18 metros, que han instalado un sistema de cableado en el paseo peatonal que conecta las dos márgenes del río Ebro. Sobre la misma, las plataformas han extendido su brazo hasta situarse a menos un metro y alcanzar la cara inferior de la pasarela, en una maniobra que se ha realizado con total seguridad y comodidad de los operarios.