Seis predicciones de Fernando Colás, CEO de Automatización Industrial en Omron EMEA

La IA, la ciencia de datos, los gemelos digitales y la tecnología de detección, supervisión y visión serán esenciales para desarrollar soluciones de automatización y control, que puedan ayudar a la industria manufacturera a adaptarse a esta nueva realidad. Omron, compañía experta en soluciones de automatización industrial, ha analizado cuáles serán las principales tendencias que afectarán y darán forma a la automatización industrial en 2024.

Fernando Colás, CEO de Automatización Industrial en Omron EMEA.

La reciente escasez de suministros ha puesto de manifiesto la fragilidad de las cadenas de suministro mundiales, lo que ha llevado a muchos fabricantes a cuestionarse la conveniencia de las cadenas de suministro largas y complejas y de producción deslocalizada. En consecuencia, las empresas están deslocalizando y relocalizando sus capacidades de fabricación, aislándolas de futuras crisis y reduciendo la distancia con el cliente.

Los fabricantes quieren aplicar este cambio de estrategia con el apoyo transfronterizo de sus socios de automatización: quieren soluciones universales y transferibles que puedan reproducirse en distintas zonas geográficas, y quieren una producción estandarizada para garantizar a sus clientes el mismo producto, independientemente de dónde se fabrique. Esto exige una fuerte inversión en innovación, un enfoque transfronterizo del diseño y una sólida red de integradores de sistemas.

La crisis de suministros también ha disminuido el papel del producto y el precio en la toma de decisiones de compra, y ha amplificado la importancia de la proximidad y la experiencia. Esto está cambiando la forma en que los fabricantes conectan y se relacionan con sus socios de automatización. Ya no quieren comprar un “sistema”, quieren una “solución”, y el servicio y el respaldo tienen más peso que nunca.

Consciente de que se trata de una tendencia duradera, en los últimos años desde Omron nos hemos alejado de un modelo de negocio centrado en el producto, para adoptar un enfoque orientado a las soluciones que sitúa la experiencia del cliente en su centro. Omron cree firmemente que si los fabricantes pueden entender cómo la automatización inteligente puede resolver los problemas a los que se enfrenten, se comprometerán con ella.

El cambio hacia la fabricación flexible, en marcha desde hace algunos años, está cobrando impulso y evolucionando como concepto para permitir a los fabricantes pivotar rápidamente si surge la necesidad. La fabricación HMLV (bajo volumen, alta combinación) ha alcanzado nuevos niveles de personalización -sobre todo en la industria farmacéutica- y los flujos de trabajo flexibles que pueden cambiar sin problemas entre distintos productos son característicos de la producción localizada.

Sin embargo, el principal reto de la fabricación flexible es hacerlo económicamente viable. Conectar el mundo OT con el mundo IT es la clave para optimizar el coste de la ingeniería, y la creación de gemelos digitales se adoptará ampliamente con este fin. Con la tecnología de gemelo digital, las empresas pueden rediseñar la producción y probar los cambios en entorno virtual. Esto no solo reduce el tiempo de desarrollo, sino que también disminuye los riesgos y optimiza los costes de los proyectos.

“La tecnología de gemelos digitales cambia las reglas de la fabricación flexible. Ya se está utilizando en un contexto de automatización industrial y esperamos que despegue realmente en 2024. En previsión de ello, estamos enriqueciendo nuestras capacidades de software y simulación y forjando alianzas que aprovecharán las sinergias OT-IT”, explica Colás.

Además de utilizar la realidad virtual para optimizar costes, los fabricantes confiarán cada vez más en la supervisión de las máquinas en el mundo real para agilizar las operaciones de fabricación flexibles, y hacerlas más sostenibles. Los fabricantes de todos los sectores quieren reducir el consumo de materias primas y energía y buscan respuestas en sus proveedores de automatización. En un entorno de fábrica, la adquisición y el análisis de datos junto con sistemas de control de alto rendimiento pueden impulsar mejoras en este ámbito. Con este fin, Omron ha desarrollado i-BELT, un servicio que utiliza los principios del Internet de las cosas (IoT) y el análisis de datos para mejorar la eficiencia de los sistemas automatizados.

Otro reto que acompaña a la fabricación flexible es el mantenimiento de las normas de seguridad y calidad. Esto se debe a que, cuantas más variables hay en la mezcla de producción, mayor es el potencial de errores y problemas. En un mundo en el que las marcas están cada vez más sujetas al escrutinio público y la reputación puede destruirse en un instante, las empresas se toman la seguridad más en serio que nunca. Esto está impulsando el desarrollo de sistemas de inspección automatizados basados en IA que garantizan la seguridad, integridad y calidad de cada producto, incluso en operaciones de lotes pequeños.

En la vida cotidiana, la omnipotencia de la IA podría percibirse como una amenaza, pero en el ámbito de la automatización industrial representa una oportunidad enorme, y aún en gran medida desaprovechada, para mejor continuamente el rendimiento de los sistemas.

Omron está aplicando la IA “al borde”, en robótica, controladores y sistemas de visión. La estamos utilizando para identificar defectos muy pequeños en superficies espejadas y para detectar atascos en el interior de máquinas de envasado. Nuestro ámbito de aplicación para la IA es el entorno de producción y seguiremos explorando y avanzando en su uso en este campo”, añade Colás, añadiendo que la próxima frontera de la IA será lograr una mayor conectividad entre estos y otros sistemas de la fábrica y detectar percepciones y patrones que no son evidentes para los humanos, aumentando así la productividad.

“En los próximos años, la transición a un nuevo paradigma de fabricación totalmente flexible dominará y guiará la dirección de los avances en automatización. Esto permitirá a las empresas hacer frente a los retos futuros de la cadena de suministro y, al mismo tiempo, satisfacer las demandas de los clientes. Paralelamente, asistiremos a una evolución hacía una fabricación más autónoma, que dé prioridad a la calidad, la seguridad y la sostenibilidad”, resume Fernando Colás.