El auge del mercado de las plataformas elevadoras de poca altura

La demanda del mercado de plataformas elevadoras de poca altura está creciendo rápidamente en todo el mundo. Son herramientas perfectas para realizar trabajos en zonas de difícil acceso en espacios reducidos lo que hace que sea un mercado en auge.

Este tipo de plataformas se consideran una opción más ergonómica que las escaleras de mano y andamios. Ofrecen una altura máxima de trabajo de 5,4 m y pesan menos de 500 kg.

Estas máquinas se utilizan principalmente en trabajos donde normalmente se utilizan una escalera o un andamio, ya que pueden desplazarse fácilmente por una instalación y montarse o desmontarse rápidamente, permitiendo a los trabajadores acceder a pasarelas, rellanos y otras zonas de difícil acceso. Estas plataformas elevadoras son ideales para aplicaciones que incluyen trabajos mecánicos y eléctricos, HVAC y conductos, colgar paneles de yeso, pintar, reformar, trabajos de acabado de construcción, limpieza, etc.

Hay tres tendencias clave que aceleran la demanda y la adopción de las plataformas elevadoras de poca altura:

• Cada vez más, las empresas buscan sustituir las escaleras y los andamios por alternativas que ofrezcan una forma más segura de realizar trabajos en altura. Las caídas de escaleras y las lesiones por sobrecarga como consecuencia del uso de las mismas tienen consecuencias negativas. Además, las caídas pueden provocar otros contratiempos: pérdidas de tiempo, reducción de la productividad, costosas reclamaciones de indemnización a los trabajadores, etc.
• La segunda tendencia, los nuevos tipos de construcción. Con menos espacio abierto y edificios cada vez más altos y estrechos, hay una mayor necesidad de utilizar máquinas que ocupen poco espacio, que sean más ligeras para su uso en suelos sensibles. Además, es importante que puedan moverse entre plantas. Que puedan acceder a los ascensores para la realización de los trabajos de acabado y equipamiento, así como para el mantenimiento continuo.
• Por último, la mayor atención a las consideraciones medioambientales. Las plataformas elevadoras manuales o eléctricas son más silenciosas y eliminan o reducen totalmente las emisiones, lo que las hace adecuadas para su uso en cualquier lugar, desde bibliotecas y hospitales hasta edificios de oficinas y universidades. Incluso también para la realización de trabajos nocturnos.

Las plataformas elevadoras de poca altura no tienen un tamaño único. Hay muchas opciones entre las que elegir. La variedad de estas plataformas permite que las personas se adapten a espacios reducidos y se muevan con facilidad. A la vez, son lo suficientemente ligeras para su uso en suelos sensibles y en ascensores.

Por un lado, las plataformas elevadoras manuales son más ligeras y silenciosas que las plataformas elevadoras eléctricas.

Por otro lado, aunque siguen teniendo un tamaño pequeño, las plataformas elevadoras eléctricas o mixtas suelen ocupar un espacio ligeramente mayor, son más pesadas y tienen una mayor capacidad de plataforma, lo que permite al operario transportar más herramientas y materiales en el área de trabajo a la vez que reduce el número de veces que tiene que subir y bajar durante la jornada laboral.

Los operarios que utilizan una plataforma elevadora de poca altura pueden utilizar ambas manos cómodamente para realizar los trabajos de forma segura, a 360 grados. Algo que no se puede realizar con las escaleras de mano. Con ellas, los trabajadores a menudo deben utilizar una mano para estabilizarse en la altura, dejando sólo una mano libre para realizar una tarea.

Las plataformas elevadoras de poca altura también tienen ventajas de portabilidad. Estas máquinas pueden bajarse y trasladarse fácilmente de un lugar a otro, lo que permite la realización de múltiples tareas en toda la instalación en menos tiempo.

El mercado de las plataformas elevadoras de poca altura manuales incluye modelos que cuentan con un sistema patentado de elevación de energía almacenada. No requiere baterías, sistemas hidráulicos, aceite ni controles. Como no hay sistema hidráulico ni motor, estas plataformas no tienen fugas y funcionan de forma silenciosa, lo que las convierte en las máquinas perfectas para trabajar en zonas sensibles desde el punto de vista medioambiental: salas limpias, centros de datos, hospitales, escuelas, bibliotecas, edificios de oficinas donde existen restricciones de ruido, etc. El operario sólo tiene que activar la manivela manualmente para acceder a la zona de trabajo.

Las plataformas elevadoras de poca altura eléctricas o mixtas combinan la altura y el alcance con una baja presión de apoyo sobre el suelo, lo que los hace óptimos para su uso en suelos sensibles y cuando se requiere el traslado entre plantas mediante ascensores. Cuando se requiere potencia, estas plataformas ayudan a impulsar la productividad durante los trabajos de acabado o el mantenimiento rutinario en espacios interiores.

También es importante tener en cuenta que las plataformas elevadoras de poca altura ayudan a reducir la fatiga del trabajador. Con las escaleras de mano, un trabajador debe subir y bajar para coger las herramientas que necesita. Puede ser un trabajo agotador y puede provocar un mayor riesgo de caídas o lesiones. Sin embargo, las plataformas elevadoras de poca altura ofrecen espacio y bandejas para guardar las herramientas que permiten realizar el trabajo de forma más rápida y segura.

Al tratarse de máquinas ligeras y de tamaño compacto, permiten un desplazamiento fácil y requieren un espacio de almacenamiento mínimo, lo que las hace ideales para el mantenimiento continuo de instalaciones. Desde aeropuertos hasta centros de datos. Además, se utilizan en obras de construcción para trabajos de acondicionamiento y acabado, como la pintura, la instalación de sistemas de alarma contra incendios o de rociadores, la colocación (o la sustitución) de la iluminación, así como otro tipo de tareas similares.

Las aplicaciones más comunes de las plataformas elevadoras de poca altura son:

• Realización del mantenimiento de instalaciones en el sector de la sanidad, la educación, los centros de datos y las oficinas.
• Completar las tareas de los instaladores, como trabajos de pintura, instalación de calefacción y aire acondicionado y los trabajos eléctricos y mecánicos.
• Reacondicionamiento de los expositores de las tiendas.
• Mantenimiento de equipos de producción en entornos industriales.

Las plataformas elevadoras son equipos de trabajo muy diversos, con diferentes características, estructuras, tamaños, alturas de alcance, capacidad de desplazamiento, adaptación al terreno, accesibilidad, seguridad, etc., proporcionando un abanico de diferentes tipos y modelos de estas máquinas que se pueden adaptar a cada situación.

Saber qué tipo de plataforma elevadora se debe utilizar para cada tipo de trabajo y situación marcará una gran diferencia en términos de facilidad de acceso, tiempo para completar el trabajo y garantizar la seguridad de las tareas a realizar, siendo un punto clave para la seguridad la correcta elección de la PEMP adecuada para cada trabajo.

En Liftisa innovamos en soluciones de plataformas elevadoras manuales, mixtas y autopropulsadas, para ofrecer siempre la mejor opción en el trabajo en altura. Creemos en la necesidad de impulsar un cambio para mejorar la seguridad, la eficiencia y la productividad en el trabajo a poca altura.

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