10 medidas para evitar el contagio de la COVID-19 en locales cerrados
La Comisión de Ventilación y Climatización de locales del Consejo General de los ingenieros industriales lanza un decálogo de soluciones para evitar el contagio en espacios cerrados durante las navidades
Los ingenieros industriales llevan desde marzo aportando soluciones durante esta pandemia. El diseño de respiradores o la gestión del hospital levantado en IFEMA han sido llevada a cabo por ingenieros industriales y probablemente fue la actuación más visible, sin embargo, en las últimas semanas, la recién creada Comisión de Ventilación y Climatización de Locales del Consejo General de Ingenieros Industriales ha tomado el relevo en las soluciones respecto al contagio por aerosoles en espacios cerrados.
Para el CGCOII hay que hacer que los espacios interiores se parezcan lo máximo posible a los espacios exteriores.
En estos momentos, las tasas de contagio en España se mantienen en niveles extremadamente altos. Según todos los expertos solo podremos decir que estamos en una situación segura cuando se logren reducir a valores en siete o catorce días de diez o veinte contagios cada 100.000 habitantes.
Como reflejan los informes del Ministerio de Sanidad Consumo y Bienestar Social y del Ministerio de Ciencia e Innovación, está reconocido oficialmente que la transmisión dominante del SARS-COV-2 se produce por el aire en forma de aerosoles por lo que reconocer que la transmisión dominante por aerosoles frente a las gotículas está suponiendo un cambio sustancial sobre cómo protegernos de la COVID-19. Una persona contagiosa emite unas 1.000 veces más aerosoles que gotículas. Las gotículas caen rápido y los aerosoles quedan en el aire esperando ser inhalados.
En espacios interiores compartidos, los aerosoles exhalados tienden a dispersarse y acumularse por toda la sala cuando no está bien ventilada, manteniéndose suspendidos en el aire durante horas con virus activo por lo que es imprescindible reducir al máximo la permanencia en espacios interiores compartidos, evitando cualquier actividad que no sea esencial.
Como afirman los miembros de la Comisión de Ventilación y Climatización del Consejo General, “el trío distancia-mascarilla-higiene sigue siendo válido, pero hay que redefinirlo para proteger de aerosoles”. La distancia debe usarse para evitar respirar aire exhalado de otras personas. La mascarilla es para filtrar el aire exhalado y el inhalado, reduciendo la cantidad de aerosoles en el aire. Para filtrar bien tiene que estar muy bien ajustada, ser de un tejido especial para filtrar aerosoles y hay que usarla siempre. La mejor para interiores es la FFP2 (o similar), seguida de las quirúrgicas. La higiene sigue siendo importante para prevenir contagios por contacto: Fómites. Se requiere limpieza frecuente de manos y la desinfección de superficies.
Hay que hacer que los espacios interiores se parezcan lo máximo posible a los espacios exteriores
Por ello, ante las próximas fiestas navideñas, el Consejo General de Colegios de Ingenieros Industriales (CGCOII) propone un completo decálogo para evitar el contagio por la COVID-19 en locales partiendo que hay que reducir la presencia en cualquier espacio interior compartido y evitar mezclarse con otros grupos estables de convivencia
10 Medidas anti-COVID19 en locales
10 Medidas anti-COVID19 en locales.
- Ventilar adecuadamente. Es el principal factor a controlar. La dilución por ventilación (natural o mecánica) consiste en extraer aire interior y sustituirlo por aire exterior para reducir la concentración de aerosoles emitidos por las personas en los espacios interiores. Es muy eficaz para reducir el riesgo.
- Uso de un medidor de CO2. Se puede conocer la eficacia de la ventilación con un medidor de CO2 (con sonda NDIR). A 800 ppm, el 1% del aire que respiramos ya ha sido exhalado por otra persona. La normativa pre-COVID establece, dependiendo del tipo de uso, no superar unos 900 ó 1.000 ppm en interiores. Con una ventilación deficiente es fácil superar los 2.000 a 4.000 ppm. Los valores normales en la calle son unos 400ppm. El objetivo para COVID es ventilar al máximo para acercarnos al valor de 400 ppm. En los locales con todas las medidas, nunca deberían superarse el límite de 700 ppm y locales con más riesgo (por voz, actividad física, mascarilla retirada, frio, sequedad…) requieren límites más bajos.
- Filtrar ayuda. La filtración con equipos de ventilación mecánica puede reducir parcialmente la cantidad de aerosoles, pero con filtros viejos y/o colmatados tiene una eficacia reducida. Conviene sustituir los filtros y, si la máquina lo admite, instalar unos de mayor filtrado. Una opción muy eficaz son los filtros HEPA portátiles (purificadores de aire) que retienen de forma eficaz los aerosoles del aire. Es importante ver el CADR del equipo y el volumen de la habitación a proteger. Necesitamos que renueve 5 ó 6 renovaciones/hora. Los filtros HEPA son muy seguros para las personas porque no añaden nada al aire, pero no se puede medir su efecto con el CO2. En salas grandes puede ser necesario instalar varios equipos. Filtrar no sustituye la necesidad de ventilar.
- Temperatura. El virus tiene mayor pervivencia a temperaturas bajas. Pero subir mucho la temperatura acelera la inactivación del virus. Es prioritario mantener una buena ventilación. A temperaturas en torno a 21-26 °C el 90% del virus se inactiva en 3 a 2 horas. En actividades con temperas muy bajas (como alimentación) resulta más importante ventilar bien debido a la mayor pervivencia del virus. Los medidores de CO2 NDIR incluyen medición de temperatura.
- Humedad Relativa (HR). El virus sobrevive mejor con baja HR y con alta HR. Es bastante eficaz mantener HR entre 40-60% para reducir la pervivencia del virus. En invierno la HR de los espacios interiores suele estar en el 30%. La instalación de humidificadores en locales secos puede ser eficaz. Los medidores de CO2 NDIR incluyen medición de HR.
- Ambientes Silenciosos. Los niveles elevados de música o ruido obligan a elevar la voz. Cuando hablamos generamos 10 veces más aerosoles que en silencio. Por eso para hablar la mascarilla es obligatoria. Debemos intentar hablar en voz baja ya que gritar o cantar genera hasta 50 veces más aerosoles que cuando respiramos. Locales con mayor nivel acústico requieren reforzar la ventilación, bajando el límite de CO2 admisible.
- Actividad Fisica. La actividad física más elevada incrementa la respiración. Andando emitimos más aerosoles que en posición estática. Y cuando hacemos ejercicio, saltamos o bailamos más aún. Locales con mayor actividad física requieren reforzar la ventilación.
- Permanencia. El riesgo de contagio aumenta conforme permaneces más tiempo en locales interiores compartidos. Y las distintas exposiciones se acumulan aumentando la probabilidad de contagiarse. Alguna recomendación limita el tiempo de permanencia en un local cerrado a 30 minutos.
- Medidas Técnicas Especificas. Además de las medidas convencionales hay soluciones específicas frente al virus, pero que requerirán de equipos profesionales para su diseño e instalación. Algunas integran sistemas de IA (Inteligencia Artificial) con cámaras y sensores distribuidos capaces de identificar situaciones relativas a uso de mascarillas, distancias, defectos de ventilación… Otras emplean tecnologías germicidas-virucidas como Ultravioletas en techos o conductos de A/A. En ningún caso debe usarse tecnologías que emiten contaminantes (como ozono, desinfectante…) con presencia de personas.
- Distancia-Mascarilla-Higiene. Las medidas de distancia-mascarilla-higiene siguen siendo fundamentales para controlar la propagación del virus. Pero hay que entenderlas para proteger de aerosoles y saber que si en espacios exteriores son fundamentales, en interiores se hacen mucho más necesarias todo el tiempo que permanecemos en el espacio interior compartido.
Otras medidas a tener en cuenta
La comisión de ventilación y climatización de locales del Consejo General recomienda otras medidas que deberíamos tener en cuenta:
En climatización de edificios con sistemas de ventilación mecánica:
- Se recomiendan tiempos de operación más prolongados de lo habitual en los horarios de funcionamiento del sistema de climatización con el fin de aumentar el aire exterior de ventilación, así como la extracción.
- Recirculación de aire en UTAs; en el caso de utilización de Unidades de Tratamiento de Aire (UTAs) centralizadas con recirculación se recomienda evitar esa recirculación central durante episodios de SARS_CoV-2 cerrando compuertas de recirculación y trabajando exclusivamente con aire exterior.
- Se desaconseja emplear los dispositivos de recuperación de calor dado que podrían llegar a transportar virus unidos a partículas desde el lado del aire de extracción al lado del aire de impulsión a través de fugas.
- La extracción de aire en servicios higiénicos y locales de descanso siempre debería estar en funcionamiento las 24 horas, los 7 días de la semana, con el fin de favorecer el efecto limpieza del lugar.
- La limpieza de los conductos de retorno y extracción no es necesaria para prevenir infecciones entre locales si se siguen las instrucciones anteriores sobre recuperadores de calor y recirculación. o Los filtros saturados no son una fuente de contaminación, pero reducen el flujo de aire de suministro, lo que tiene un efecto en la ventilación general.
En climatización en edificios con sistemas de ventilación natural:
- En edificios sin sistema de ventilación mecánica se recomienda abrir ventanas exteriores (mucho más de lo normal), con el fin de aumentar la ventilación natural, incluso aunque esto suponga una cierta incomodidad térmica; en estos casos, la ventilación natural es la única opción viable para renovar el aire de las zonas ocupadas.
- Extracción en cocinas (punto de vista de la hostelería); todas las cocinas disponen de cámara extractora para humos. Solo una pequeña proporción de ellas dispone de aportación de aire exterior bien a la cocina bien a la propia campana. Además de la necesaria y obligatoria ventilación de los locales habría que estudiar los flujos de aire que se producen como consecuencia de este hecho. Habría que ‘obligar’ a que los locales tengan un aporte de aire en la cocina, independiente del resto del local.
- La oxidación catalítica consiste en el uso de un catalizador de TiO2, óxido de titanio, que transforma parte del vapor de agua contenido en el aire, en peróxido de hidrógeno, H2O2, generando un poder desinfectante. De acuerdo con el documento ‘Recomendaciones de operación y mantenimiento de los sistemas de climatización y ventilación de edificios y locales para la prevención de la propagación del SARS-COV-2’ la oxidación fotocatalítica se demuestra muy eficaz en la neutralización de los patógenos aerotransportados; sin embargo, debe ser diseñada e instalada de tal forma que se eviten los posibles compuestos residuales, como ozono. Y sólo puede usarse en ausencia de personas en el local por el riesgo que supone la inhalación de H2O2.
Una última puntualización respecto a la ventilación:
- Los locales que lo tienen más fácil para ofrecer un aire con menor riesgo de contagio a empleados y clientes son los locales pequeños y abiertos a la calle. Con el simple hecho de mantener la puerta abierta durante la jornada laboral suele ser suficiente. Y con un medidor de CO2 pueden saber si es suficiente abrir 15 cm o hay que mantener la puerta completamente abierta. Y no olviden comprobar los niveles en zonas más interiores como (oficinas, almacenes o aseos)
- Los locales medianos o alargados normalmente requerirán una combinación de ventilación natural y mecánica. Pero la única forma de saberlo es midiendo el CO2 en momentos de mayor ocupación del local.
- En instalaciones de grandes dimensiones se hace necesaria una valoración técnica en detalle para aportar soluciones específicas. Existen muchas tecnologías que permiten el control en tiempo real y la actuación con sistemas inteligentes para garantizar unos niveles de riesgo tolerables frente a la COVID.