Entra en vigor el nuevo Reglamento europeo sobre el etiquetado energético
Esta nueva norma sobre etiquetado energético, donde la eficiencia energética es el eje principal, permitirá a los usuarios y consumidores, tomar decisiones en relación al consumo energético de todos los productos relacionados con la energía.
Habiendo evaluado la eficacia de la Directiva 2010/30/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, la Comisión puso de manifiesto la necesidad de actualizar este marco para mejorar su eficacia y sustituir esta norma por un reglamento. El nuevo reglamento mantiene el ámbito de aplicación de la anterior norma, pero modifica y refuerza algunas de sus disposiciones, teniendo en cuenta el avance tecnológico de los últimos años cuando a eficiencia energética de los productos. Vale a decir, que en base a eso, el reglamento incluye el reescalado de todas las etiquetas hacia únicamente las categorías de la A en la G, para evitar las actuales A+, y superiores, y aprovecharlo por qué la diferencia de consumo entre una categoría y la siguiente sea uniforme en toda la escalera de categorías.
La mejora de la eficiencia energética de los productos relacionados con la energía a raíz de la capacidad del cliente de decidir con conocimiento de causa, beneficia la economía de los países de la UE, reduce su demanda energética, y permite a los clientes ahorros en la factura energética. Además, esta medida contribuye a la innovación y a la inversión en eficiencia energética y permite a las industrias punteras en ecodiseño ser más competitivas que el resto.