El World Energy Outlook 2012 analiza el sector energético
Como viene siendo habitual, la publicación fue presentada por el Dr. Fatih Birol, Economista Jefe de la Agencia Internacional de la Energía y máximo responsable de este importante estudio, que estuvo acompañado por D. Rafael Villaseca, Presidente del Club Español de la Energía y Consejero Delegado de Gas Natural Fenosa; D. Miguel Antoñanzas Alvear, Presidente de E.ON España; y D. Alberto Lafuente Félez, Presidente de la Comisión Nacional de Energía. El acto contó con la asistencia de numerosos profesionales del sector energético en España.
El WEO 2012 reúne los últimos datos disponibles, los progresos habidos en materia de política energética y la experiencia de un nuevo año transcurrido, para realizar un sólido análisis sobre cómo el sistema energético global podría evolucionar en el próximo cuarto de siglo. Además, la edición de 2012 dedica secciones específicas al análisis en profundidad de las siguientes cuestiones estratégicas que influirán en el futuro energético como son, entre otras: la eficiencia energética; las perspectivas del sector energético de Iraq; el nexo agua–energía; y el acceso universal a la energía.
Además, se prevé que las necesidades de agua para la producción de energía crezcan dos veces más rápido que la demanda de esta última. La expansión de la generación eléctrica y la producción de biocombustibles hacen aumentar en un 85% el consumo previsto de agua (la cantidad extraída que no vuelve a fuente) para 2035. El agua gana importancia como criterio de evaluación de la viabilidad de los proyectos de energía, ya que el aumento de la población y del crecimiento económico intensifica la competición por los recursos hídricos.
Efficient Word Scenario
El WEO 2012 incluye también los resultados del Efficient Word Scenario, que muestra cómo la lucha contra las barreras que obstaculizan la aplicación de las medidas de eficiencia energética puede desbloquear su potencial y reportar enormes ganancias en términos de seguridad energética, crecimiento económico y medio ambiente.
De esta forma, se reduciría a la mitad el crecimiento de la demanda mundial de energía primaria hasta 2035. La demanda de petróleo alcanzaría su máximo antes de 2020 y sería prácticamente 13 millones de barriles diarios de petróleo menor en 2035, una reducción equivalente a la producción actual de Noruega y Rusia juntas. Los recursos ahorrados facilitarían una paulatina recuperación de la economía global, aumentando el producto económico mundial acumulado hasta 2035 en 18 billones de dólares, con los mayores beneficios en términos de PIB para India, China, Estados Unidos y Europa.