Rockwool favorece el ahorro de energía con medidas que reducen hasta un 27% el gasto en aire acondicionado en verano

Más de un millón de aparatos de aire acondicionado y sistemas de refrigeración en hogares se instalan cada año en España. Todas estas instalaciones hacen crecer en un 45 por ciento el consumo energético en verano y aumentan las posibilidades de sufrir una saturación de la red eléctrica. "El incremento en el uso de la energía eléctrica en verano, particularmente en lo que concierne a la utilización de los sistemas de climatización, es inevitable, aunque existen medidas para controlarlo", asegura Jordi Bolea, responsable del departamento de Reglamentación Técnica y Certificación de Productos de Rockwool. Bolea explica que "Es esencial para ahorrar energía en aire acondicionado un óptimo aislamiento de la vivienda. Para ello, existen resoluciones pasivas de ahorro".

De entre estas medidas destacan la aplicación del espesor de aislamiento óptimo según las condiciones climáticas de cada zona, lo cual contribuye a reducir la pérdida térmica a través de la parte envolvente del edificio. Con una inversión adicional en aislamiento de 6 /m2 se pueden reducir hasta en un 27 por ciento los costes en la factura eléctrica. Ventanas de doble acristalamiento, además de la colocación de toldos o persianas en aquellas ventanas que reciben los rayos del sol directamente. Reducir la infiltración por ventanas y puertas sellándolas con atención sobre todo alrededor de juntas, esquinas y materiales que ocasionan elevadas pérdidas energéticas.

Asimismo, se pueden aplicar otras medidas útiles para lograr el ahorro energético que inciden directamente en el aparato de aire acondicionado. En ese sentido, al comprar un nuevo aparato de climatización es indispensable comprobar la etiqueta de eficiencia energética, certificado obligatorio en productos de uso doméstico tales como electrodomésticos, que marca el nivel de eficiencia y consumo energético de los mismos. Limpiar o reemplazar con regularidad los filtros del aparato climatización, ya que si están tapados, el sistema utiliza más energía para enfriar. Además de un correcto uso, es necesario mantener en perfectas condiciones nuestro sistema de aire acondicionado. Poner el termostato y regular el aire acondicionado a una temperatura de 24ºC, ideal para generar bienestar y ahorrar energía. Cada grado más supone un 8 por ciento de ahorro. Una ventilación controlada con el uso de sistemas de recuperación de calor y aire acondicionado garantiza la calidad del aire interior y un limitado consumo. Para mantener la temperatura marcada es necesario no abrir las ventanas mientras esté encendido el aire acondicionado.

La arquitectura bioclimática, un nuevo concepto de arquitectura que consiste en el diseño de los edificios teniendo en cuenta el clima y las condiciones del entorno, permite reducir el impacto en el medio ambiente del consumo energético de las viviendas y fomentar la sostenibilidad. De acuerdo con esto, el estudio CTE Plus de Rockwool demuestra que sólo en la Comunidad de Madrid se podrían reducir la emisión anual de CO2 en más de 44.472 toneladas. “Ser responsables a la hora de utilizar el aire acondicionado ayuda a mejorar el medio ambiente, disminuyendo la emisión de gases contaminantes. El ahorro energético es absolutamente imprescindible, si deseamos reducir la contaminación del aire y el calentamiento de la atmósfera terrestre. La eficiencia energética se ha convertido en la mayor fuente de energía" comenta Jordi Bolea. "Para lograr la eficiencia energética basada en la reducción del consumo de energía, manteniendo los mismos servicios y fomentando un uso sostenible de la energía se deben introducir políticas energéticas basadas en prioridades más eficaces y sostenibles", explica el responsable de Rockwool.