Schneider Electric presenta nuevas soluciones de gestión térmica
21 de diciembre de 2012
Josep López, responsable de producto de Soluciones Térmicas de Schneider Electric, afirma que “la realización de un balance térmico completo y fiable es indispensable antes de afrontar cualquier solución de gestión, que consiste en medir y analizar las condiciones térmicas en el interior y en el exterior del armario. A partir de esta mediciones y apoyándose en el software ProClima de Schneider Electric, será más fácil identificar las soluciones apropiadas para el armario de control y su ambiente de instalación”.
Para conseguir una correcta gestión térmica, el equipo de I+D de Schneider Electric recomienda que el dimensionamiento de la solución de gestión térmica se adapte a la temperatura crítica del elemento más sensible del armario. En concreto, la temperatura media de funcionamiento recomendada en el interior del armario es de 35°C.
Software ProClima
“Al final lo que buscamos son arquitecturas de enfriamiento correctas que permitan reducir el consumo, que eviten disfunciones y, por supuesto, que reduzcan drásticamente un paro en una industria de proceso continuo”, subraya Josep López.
Tendencias en las instalaciones
Otro ejemplo son las instalaciones eólicas a mar abierto o instalaciones cercanas al ártico, donde se exigen temperaturas entre -40°C y -50°C y, por lo tanto, resulta imprescindible aislarlas.
Los retos de la gestión térmica
La combinación ideal para una instalación sin riesgo de avería pasa por la elección del IP correcto adaptado a la agresividad de cada ambiente, la selección de la solución térmica correcta y perfecta instalación, además del conocimiento de las pérdidas de potencia de la instalación en W.
Existen dos grandes familias de soluciones de gestión térmica que ofrece Schneider Electric: Pasivas y Activas. Dentro de las primeras, una solución pasa por ampliar el volumen del armario, lo que significa que el cojín de aire que el cliente compra permite reducir la rampa de temperatura en aquellas 2 horas de máximo calor en verano cuando las instalaciones sufren mucho. También por la distribución correcta de los equipos instalados –con la separación de control respecto de potencia–, la utilización de una convección interior permanente y el color del armario, ya que con un color blanco se pueden evitar hasta un 80% de las emisoras recibidas por el sol. Otra solución pasiva tiene que ver con la extracción de las cargas al exterior del armario, siendo el caso más flagrante los frenos para variadores, ya que de este modo se eliminarán muchos wattios que no deberán enfriarse.
Dentro de las soluciones activas de gestión térmica, la ventilación supone una excelente solución para instalaciones con un mínimo de 5°C de temperatura inferior a la deseada dentro del armario. Consumen muy poco (< 100W) y proporcionan muy buena extracción de calorías.
Por su parte, los intercambiadores aire-aire facilitan la extracción de calor a través de baterías de intercambio, sin dejar entrar el aire en el interior y tienen baja capacidad de extracción, siendo ideales para entornos industriales climatizados. En el caso de los intercambiadores aire-agua, son de aplicación muy apropiada en industrias con mucha polución como las del aceite o la harina, en las que no se puedan instalar soluciones con filtro. Necesitan de un circuito cerrado de agua (glicolada) y la extracción de calor dependerá de la temperatura del agua.
Por último, los climatizadores son una solución activa muy interesante en entornos de altas temperaturas al ser equipos que extraen el calor y deshumidifican independientemente de la temperatura exterior. Los climatizadores de Schneider Electric resisten hasta 55°C de temperatura exterior, por lo que estos equipos son altamente fiables e idóneos para aplicaciones industriales severas.