Duros objetivos de CO2 para la industria automotriz en tiempos de dificultades económicas
19 de julio de 2012
Tras la aprobación el pasado 11 de julio de las propuestas de la Comisión Europea para reducir las emisiones de CO2 de coches y furgonetas, la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA) deberá trabajar a fondo para determinar los pasos a seguir para alcanzar estos objetivos así como su viabilidad, y lo que ello significa en la práctica para la industria en su conjunto.

Si bien la industria del automóvil comparte las preocupaciones sobre el calentamiento global y contribuye activamente para encontrar soluciones sostenibles, los objetivos marcados —una media de 95 g de CO2/km para turismos y 147 g de CO2/km para las furgonetas para el año 2020— suponen una seria dificultad.
Cabe recordar que en 2011, las emisiones de la flota promedio fueron de 136,6 g de CO2/km frente a los 186 g de CO2/km en 1995, lo que supone un descenso del 26,6% durante el período. “Está claro que los niveles de CO2 de los vehículos tienen que continuar su tendencia a la baja y la industria se ha comprometido a cumplir con esto”, afirmó Ivan Hodac, secretario general de ACEA.