Mascato redobla su apuesta por la sostenibilidad con un gran parque fotovoltaico en su planta de procesado de Salvaterra
Redacción Interempresas02/09/2020
Mascato acaba de poner en funcionamiento una gran instalación fotovoltaica en su planta de Salvaterra de Miño que permite abastecer casi el 10% de la demanda eléctrica de este complejo de procesado y envasado de pescados congelados
Esta actuación se enmarca en la apuesta por la sostenibilidad de la firma viguesa, un compromiso con el medio ambiente que ya aplican en las pesquerías y que ahora llevan también a sus procesos industriales, de la mano de las energías limpias. La instalación ha sido ejecutada por Voltfer, enseña del Grupo Alvariño especializada en soluciones en energías renovables para empresas e industrias.
La instalación, que acaba de entrar en funcionamiento, está integrada por un total de 779 paneles solares Solarwatt y 4 inversores SMA, con 222 kW de potencia y una producción de más de 300.000 Kwh/año, lo que permitirá la total amortización de la planta en un corto período de tiempo. Además, el parque contribuye a una reducción de la emisión de gases de efecto invernadero de 97 toneladas de CO2 al año.
El gerente de Mascato, Gonzalo Rancaño, destacó que “con esta instalación damos un paso más en nuestro compromiso con el medio ambiente, que ya define nuestra actividad pesquera y comercializadora, con la sostenibilidad como referente también en nuestra energía”.
Ventajas ambientales y económicas de un nuevo modelo energético
Reducir el coste energético y la huella medioambiental son dos cuestiones claves en un entorno empresarial e industrial que aspira a la máxima competitividad desde un firme compromiso con la sostenibilidad. La tecnología solar fotovoltaica se presenta como respuesta a ambos retos, por lo que cada vez más empresas e industrias de todos los sectores apuestan por las instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo como la mejor garantía de futuro. “Se trata de una apuesta por la transición energética de la mano de una fuente de energía renovable y no contaminante, que además permite una fácil y rápida implantación y una amortización a corto plazo de las inversiones realizadas”, explica José María Fariña, director técnico de Voltfer. “Todas estas ventajas la sitúan como la renovable con mayor potencial para las firmas del tejido económico”, añade.
En este sentido, el autoconsumo basado en la generación con fotovoltaica está siendo la clave de un nuevo modelo energético para las empresas en Europa, por el cual en Galicia se está apostando de manera decidida, como se desprende de los planes del Gobierno gallego en materia de energía para los próximos años. Esta estrategia contempla a empresas e industrias de distintos sectores como objetivos prioritarios, con importantes órdenes de ayudas autonómicas dirigidas este fin. En los últimos ejercicios, el Instituto Enerxético de Galicia (Inega) ha venido convocando líneas de ayudas, ente ellas subvenciones dirigidas a empresas que permiten cubrir hasta el 45% de las inversiones en instalaciones fotovoltaicas (convocatoria actualmente abierta). Se trata de un esfuerzo que apunta a su continuidad en futuras convocatorias, en línea con el cumplimiento de los objetivos de generación energética con renovables acordados por la Unión Europea.