“La obra pública tira de la economía; si ésta funciona, funciona el país”
Entrevista a José Antonio Vicente, director de Feria de Zaragoza
11 de mayo de 2011
Algunos subsectores han caído un 60, un 70 y hasta un 80%. Todo el mundo era consciente de la situación pero nadie se esperaba esto. Ha sido un batacazo terrible, terrorífico...
Y esto habrá afectado al desarrollo de la feria...
Sí, pero menos de lo que esperábamos. Estamos satisfechos porque el visitante ha respondido. Hemos superado los 1.250 expositores, que han ocupado 300.000 metros cuadrados, es decir, los nueve pabellones cubiertos de que dispone la feria y una buena parte de la zona exterior, que incluye una importante área de demostraciones.
No está mal.
No. Además, ha habido movimiento, las empresas importantes no han faltado a su cita con Smopyc. Iniciativas como ésta muestran que tenemos un sector con mucha vida.
¿Y qué cree que piensan las empresas que han apostado por la feria?
Los expositores comentan que ha sido muy satisfactoria su presencia aquí, que les ha servido para promocionarse y presentar sus nuevos productos. Ése es, además, uno de nuestros principales objetivos: que el cliente esté lo más satisfecho posible, independientemente de que el momento económico sea mejor o peor.
Y en este contexto, ¿supongo que habrá sido bien recibido el hecho de que la organización haya rebajado en un 43% el coste de participación?
Como decía, alguno de los subsectores aquí presentes ha caído hasta en un 80%. Nosotros no podemos mirar hacia otro lado, porque somos un vehículo más, somos una plataforma de negocio para las empresas expositoras de esta feria. Esta decisión ha servido para que Smopyc se haya mantenido, pese a la crisis del sector, en unos niveles muy importantes.
Aun así, la feria no ha igualado los números de otros años...
No, claro. Es cierto que este año Smopyc ha recibido menos visitantes que en otras ediciones, pero quiero destacar que el perfil de éstos corresponde al profesional puro y duro, al que tiene decisión de compra dentro de la empresa. En esta edición, todo el que se ha acercado aquí es porque tiene algún proyecto entre manos y necesita información o quiere contrastar algo o tiene necesidad de hablar con un proveedor o de cambiar de suministrador.
¿Qué puede decirnos sobre el perfil de ese visitante?
Corresponde a empresas constructoras, a proveedores de éstas, a alquiladores de maquinaria, a empresas que explotan algún tipo de cantera, central de hormigón o planta asfáltica, así como a distribuidores y representantes de firmas, que dan servicio postventa a determinado tipo de equipos de una zona geográfica concreta.
Y en cuanto al cargo que ocupa éste dentro de la organización...
Principalmente, gerentes y gestores. También podemos encontrar cargos técnicos, que, en todo caso, son los encargados de prescribir el equipo más adecuado para una obra, una explotación o un determinado uso. A Smopyc se acercan personas con capacidad de decisión, que, al fin y al cabo, son las que interesan a las empresas expositoras.
Por lo que ha podido ver en la feria, ¿cómo afrontan las empresas esta situación de crisis generalizada?
Las firmas se han adaptado a las circunstancias y han acometido las transformaciones y las reducciones necesarias para sobrevivir en su sector. Es cierto que hay empresas que han desaparecido, empresas que se han fusionado o que, incluso, han cambiado de actividad, pero las que han resistido están preparadas para afrontar una situación de crisis porque, de hecho, llevan ya más de dos años viviéndola en sus carnes. Son conscientes de la escasa inversión por parte de las administraciones en obras públicas y de que el proceso de recuperación será lento.
¿Cuán lento?
Hay una gran confianza en el exterior, ya que el producto español es muy bueno y competitivo en otros países. Buena parte de nuestras empresas se están abriendo a otros mercados, de manera que les permite alcanzar las cifras necesarias para el mantenimiento de su actividad. En Feria de Zaragoza somos conscientes de la importancia de abrirse al exterior, por ello, este año hemos invitado a un grupo numeroso de compradores de internacionales, además de los que se han acercado a la feria por propia iniciativa.
¿Y qué debe hacer para resistir una empresa que ya ha recortado todo lo recortable?
Adaptarse a lo que es hoy la obra pública: un sector pequeño, competitivo y con escasa capacidad de financiación. ¿Qué puede hacerse? Creo que la empresa española ha sabido invertir en I+D con lo que, hoy por hoy, es competitiva en el extranjero y en nuestro propio país. Tradicionalmente, en España no ha tenido cabida el producto de baja calidad. La demanda del usuario de equipamiento y maquinaria de este sector ha exigido siempre de calidad. Estamos a un buen nivel.
¿Y esto nos librará de la crisis?
Espero que sí. En todo caso, el futuro irá a mejor. El sector remontará, de forma lenta, pero remontará. En 2014 viviremos una fase de crecimiento moderado. Para entonces miraremos atrás y veremos este desierto por el que estamos atravesando como algo lejano. La obra pública es una industria puntera y, además, uno de los sectores que tiran de la economía, con una incidencia muy importante en la reducción del desempleo. Uno de los vectores para que un país, una economía salga de la crisis es a través de la inversión en obra pública y construcción de una forma moderada y razonable. Si este sector funciona, funcionan otros muchos que dependen en cierta medida de él.