El bulevar periférico de París se pasa al verde

París tiene un cinturón de color gris. Esta circunvalación, más conocida como el bulevar Periférico, forma literalmente un círculo de asfalto alrededor de la ciudad. Ahora, se están llevando a cabo iniciativas para transformar el anillo gris en un anillo verde. Para hacerlo, los responsables del proyecto pueden inspirarse en numerosos lugares de todo el mundo donde ya se han desmantelado autopistas con éxito.

Los 35 kilómetros del bulevar Periférico, con más de un millón de vehículos al día, es uno de los tramos más concurridos de Europa. Desde su inauguración en 1973, el Periférico, que consta de hasta seis carriles, es un cinturón de asfalto que rodea París y la separa de su periferia.

La agencia pública encargada de los estudios urbanísticos, Parisien d’Urbanisme, considera que prácticamente todo el bulevar Periférico es un «desafío para la integración urbana». Sirva como ejemplo el valor de las propiedades, que desciende prácticamente a la mitad, desde los 6300 euros por metro cuadrado en la ciudad de París hasta los 3800 euros por metro cuadrado en las zonas periféricas.

En 2016, se inició el primer intento institucional para extender los límites de París más allá del bulevar Periférico. El proyecto, Métropole du Grand Paris, trata de implementar un desarrollo más integrado de la ciudad de París y su periferia mediante la creación de una nueva estructura metropolitana.

«Reinventing Paris» es una convocatoria para presentar proyectos urbanísticos innovadores que ofrece a muchos talentos de todo el mundo la oportunidad de crear el París del futuro. Ya se han presentado un total de 372 proyectos a la ciudad de París para 23 obras diferentes. Una de las propuestas ganadoras consiste en un nuevo edificio que estará situado por encima del bulevar Periférico en el corazón del barrio de Porte Maillot, una parte estratégica de la región del Grand París. En la era de la auto-obsesión, se construyó un entramado excesivo de autopistas en todo el mundo. Décadas más tarde, las ciudades se dieron cuenta de que, sin dicho entramado, todo es más saludable, ecológico y seguro. Destacamos tres desmantelamientos de autopistas en ciudades que han resultado ser todo un éxito.

En la era de la autoobsesión, se construyó un entramado excesivo de autopistas en todo el mundo. Décadas más tarde, las ciudades se dieron cuenta de que, sin dicho entramado, todo es más saludable, ecológico y seguro. Destacamos tres desmantelamientos de autopistas en ciudades que han resultado ser todo un éxito.

Cheonggyecheon, Seúl, Corea del Sur

En 1976, se construyó una autopista elevada que atravesaba Seúl con el objetivo de mejorar las perspectivas económicas de un área degradada que se había convertido en un barrio marginal. En 2003, comenzaron las obras para eliminar la vieja y sucia autopista del centro de la ciudad, restaurando la carretera, pero también un riachuelo perdido que una vez solía discurrir por la zona. Ahora, la nueva vía verde no es solamente el nuevo lugar favorito de los ciudadanos. Los pájaros, los peces y otros animales han vuelto y la temperatura ha descendido varios grados en el centro de la ciudad.

Embarcadero Freeway, San Francisco, EE.UU.

Después del terremoto de Loma Prieta en 1989, los daños sufridos obligaron a derribar la carretera State Route 480. En la actualidad, el área restaurada se ha convertido en un espacio público enorme con senderos para caminar y carriles bici. El desmantela- miento de la autopista fue uno de los primeros en mostrar al mundo que un proyecto como este no solo era posible, sino también una forma de ahorrar dinero y dar un impulso a la economía de la ciudad. La reconstrucción resultó ser más barata que la reparación de la autopista dañada por el terremoto y los valores de las propiedades aumentaron en la zona.

Pasarela de Arganzuela en Río Madrid

Hasta principios de la década de 2000, los dos grandes tramos de la autopista M30 convertían a la zona del río Manzanares en un área casi inaccesible y descuidada. En 2011 se completó la reconstrucción del área. El tráfico se desvió a tramos con túneles y las orillas del río fueron completamente remodeladas en un área recreativa de 1,2 kilómetros cuadrados. Los estudios demuestran que los residentes que viven en las inmediaciones acceden al parque con frecuencia y la vida en la zona se ha vuelto más saludable.

Por Per Grehn para Volvo Construction Equipment