GAM reduce casi un 50% su deuda financiera neta en los últimos cuatro años
Reducción del nivel de endeudamiento
La compañía cierra el año 2012, con una deuda financiera neta de 307 millones de euros, a los que hay que añadir 59 millones de préstamos participativos en manos de entidades financieras accionistas. Esta deuda, aunque sigue siendo elevada, ha experimentado una significativa reducción de 81 millones de euros en el año.
Cabe destacar, que a pesar de las dificultades, la compañía ha pasado en los últimos cuatro años de una deuda financiera neta a cierre del ejercicio 2008 de 611 millones euros, a la actual de 307 millones, lo que supone una reducción de casi el 50%, (sin tener en cuenta el préstamo participativo anteriormente mencionado).
Mejora de márgenes
A cierre del ejercicio 2012, el margen Ebitda Recurrente de la compañía (excluidos gastos asociados a la reestructuración de costes, a refinanciaciones y provisiones) ha sido del 25% (35 millones euros en términos absolutos), lo que supone una mejoría respecto al año anterior en el que se obtuvo un margen del 22%.
Esta mayor rentabilidad viene dada por la continúa mejora en la eficiencia, y por la reducción de costes en los mercados español y portugués, en los que a pesar de la caída de la cifra de negocio se incrementa la rentabilidad.
Adicionalmente, cabe destacar que la compañía, siguiendo con su criterio de “prudencia”, ha registrado 11 millones de euros como provisiones de insolvencias, un 85% de las cuales se concentran en España y Portugal.
Crecimiento en los mercados internacionales
La cifra de negocio en el mercado internacional (excluido Portugal) crece un 13%, y supone 41 millones de euros. La compañía tiene expectativas de seguir creciendo en estos mercados, fundamentalmente en el área de Latinoamérica, aunque los crecimientos se pueden ver limitados por los prudentes criterios de concesión de riesgo a clientes que la compañía aplica.
En el mercado doméstico las ventas en el año 2012 han caído un 41% como consecuencia de la mala coyuntura económica, y suponen 87 millones de euros. Así mismo en Portugal, donde la coyuntura es similar, la cifra de negocio se ha reducido en un 29%, cerrando con 12 millones de ventas. Las expectativas de la compañía en el mercado Ibérico en 2013 no son positivas en términos del nivel de actividad.
Mejora de la situación patrimonial
Como consecuencia de la mejora de márgenes y la reducción de deuda, la compañía ha conseguido atenuar las pérdidas, y cierra el ejercicio con un resultado negativo de 61 millones, frente a los 126 millones que se perdieron en 2011. Así las pérdidas del segundo semestre son de 4 millones de euros, mientras que en el primer semestre fueron de 57 millones.
Cabe señalar que de esos 61 millones de euros, en el primer semestre se incurrió en 24 millones que se corresponden con deterioro del fondo de comercio en España (que ha quedado valorado a cero) y 4 millones con la reversión de créditos fiscales también en España.
Adicionalmente, y como consecuencia de la refinanciación firmada el 29 de marzo de 2012, hay 59 millones de euros de deuda en manos de entidades financieras accionistas, que pasan a tener la consideración de préstamo participativo, y que por tanto forman parte del patrimonio a efectos de lo dispuesto en la Ley de Sociedades de Capital.
En el mismo sentido, y como la compañía ha hecho público, se ha convocado a los tenedores de los bonos con el objetivo de acordar la conversión del bono en un instrumento participativo, así como plantear la posibilidad de recomprar bonos a un precio del 20% del principal acumulado más los intereses devengados, medidas que mejorarían la situación patrimonial de la compañía.