Unión de Uniones destaca el esfuerzo de los agricultores para economizar agua en el regadío
La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, tras revisar el último informe sobre regadíos en España publicado por el MAPAMA en días pasados, constata cómo el riego localizado ha aumentado en un 14%, al considerarse el más eficiente y una buena elección frente a los años de sequía.
Unión de Uniones caracteriza este año hídrico como uno de los de peor sequía de la historia, arruinando muchas cosechas, especialmente en comunidades autónomas como Castilla y León, Extremadura o Castilla La Mancha y Valencia.
Pese a las ayudas puestas en marcha por el Ministerio en relación a la sequía, consideradas insuficientes por Unión de Uniones que ha apuntado también hacia una necesaria mejora presupuestaria y técnica del sistema de seguros agrarios, la organización destaca que con los embalses a un 52% de su capacidad –un 30 % menos de lo que sería normal en estas fechas- se hace extremadamente complicada la situación en las cuencas con menos reservas, que son Duero (46 %) Júcar (35 %) y Segura (26 %). Igualmente la situación en la cabecera del Tajo es crítica, con sólo un 13 % de los recursos hídricos que sería capaz de almacenar.
Si bien el 80% del agua que se consume va destinada a producir alimentos, Unión de Uniones quiere destacar el esfuerzo que están realizando los agricultores invirtiendo en sistemas economizadores de agua, lo que ha llevado a que el riego más eficiente, el localizado, se extienda ya en España en 2016 a 1,85 millones de hectáreas, es decir, la mitad de la superficie de regadío nacional.
En este aspecto destaca sobre todo Murcia, con un 83 % de su riego localizado, Andalucía, con el 75 %; Comunidad Valenciana con el 69 % y Castilla-La Mancha con el 60%. Por el contrario, Castilla y León con un 6 % y Aragón, con un 15 %, son las comunidades de peso agrario en donde el regadío localizado está menos extendido, habiéndose incrementado, no obstante, en Castilla y León en un 30 % en la última década.
En el contexto nacional, el estudio, además, destaca cómo, desde 2006 se han sumado 469.034 hectáreas nuevas a este tipo de riego, siendo el que más aumenta cada año, en detrimento de la superficie regada por gravedad, que se ha reducido en casi el 10 % en los últimos 10 años.
Por cultivos, el mayor esfuerzo lo han realizado los viticultores, que aplican el riego localizado en un 96 % de su superficie de riego, seguido de cerca por olivar con el 95 % y frutales y cítricos, en torno a un 80 %.
Concretamente, Castilla-La Mancha es la región que tiene una mayor superficie de riego localizado en viñedo, con cerca de 223.500 hectáreas.