Biorrefinería de Billund: la planta de tratamiento de aguas residuales del futuro con tecnología de Veolia que funciona ya
Billund, localidad danesa en el centro de la península de Jutlandia, es conocida por ser sede del grupo y por encontrarse allí el famoso parque temático Legoland. Sin embargo, de ahora en adelante éste no será el único foco de interés. La fama de esta localidad danesa se vinculará también a la economía circular y a la más vanguardista y avanzada tecnología del agua, ya que el modelo de futuro en plantas de tratamiento de aguas residuales implantado allí se está convirtiendo en un escaparate tecnológico y en un ejemplo de conservación de recursos y promoción de sostenibilidad.
La planta de tratamiento de aguas residuales del futuro, conocida como la “Biorrefinería de Billund”, es ejemplo a seguir como instalación sostenible, no sólo en Dinamarca, sino en toda Europa. Ha cosechado numerosos premios internacionales: elegido mejor proyecto del año en reutilización de aguas en los Global Water Awards -uno de los más importantes premios europeos de medio ambiente- y obtuvo también el Svend Auken en Dinamarca.
El proyecto es sin duda exportable y así lo han entendido en el ejecutivo danés cuando su ministra de medio ambiente ha declarado que “es un ejemplo de cómo llegar a soluciones que mejoran el medio ambiente en Dinamarca y que pueden hacerlo también en el resto del mundo”.
Escaparate tecnológico para una biorrefinería más que sostenible
Proyecto conjunto entre Veolia Water Technologies, el ayuntamiento de Billund y su compañía de servicios públicos Billund Vand A/S, la planta está diseñada para ser modelo de la complementariedad entre las tecnologías de tratamiento de aguas residuales y de biomasa, que pueden trabajar de manera sinérgica. La planta, de doble alimentación, tratará tanto residuos orgánicos como agua residuales, con una capacidad total para 70.000 habitantes equivalentes y 4.200 toneladas de residuos al año, procedentes tanto de hogares como de industrias localizadas en la zona.
En materia de aguas residuales, esta planta reunirá las más eficientes y avanzadas soluciones que transformarán las aguas grises y los residuos en agua y energías limpias.
El proceso de tratamiento de aguas residuales produce biomasa que, posteriormente, es tratada para producir biogás para la producción de energía, lo que reduce las necesidades energéticas de la planta y genera un ingreso adicional a través de la venta del excedente de energía a la red local. Las tecnologías medioambientales de la planta permiten la combinación eficiente del tratamiento de aguas residuales con la biogasificación de residuos orgánicos para producir hasta tres veces más de la energía que la planta de tratamiento necesita para funcionar. Otros subproductos de la planta incluyen fertilizante orgánico eficiente y libre de olores, y eventualmente, fósforo y bioplásticos biodegradables.
Tecnologías sinérgicas de Veolia Water Technologies
Veolia Water Technologies basa el rendimiento de la planta en una serie de tecnologías de tratamiento que se pondrán en marcha progresivamente. Las más destacables incluyen:
- Exelys™: Esta planta es la primera demostración a gran escala en Dinamarca de la tecnología de última generación de hidrólisis térmica en continuo. Compacta y robusta, reduce la producción de lodo mediante una mejor digestión y deshidratación, a la vez que aumenta la producción de gas entre un 20 y un 40%.
- STAR Utility Solution: Un avanzado sistema de control en línea para plantas de aguas residuales que mide los procesos en el momento y reduce al mínimo el consumo de energía y productos químicos. En el caso de fuertes precipitaciones, parte de la capacidad de tratamiento de la planta se puede conmutar para tratar el agua de tormenta, optimizando el control de la contaminación y reduciendo el riesgo de desbordamiento. Mediante la integración de un uso multifuncional del filtro mecánico en la estrategia de gestión de la planta, junto a la incorporación de un sistema de alerta en línea, Billund da el primer paso hacia la gestión coordinada de las plantas de tratamiento y de los sistemas de drenaje del municipio. Otros controles incluyen la supervisión y la optimización de la alimentación de la biomasa para maximizar la producción de biogás y evitar la sobrecarga de los digestores.
- ANITA™ Mox: Tecnología de tratamiento eficiente de reactor de lecho móvil (MBBR). Aumenta la capacidad de tratamiento y la eficiencia energética mediante la conversión de amoníaco en nitrógeno (N2) sin utilizar material orgánico, usando bacterias anammox.
- Tecnología BioPasteur™: Este producto calienta los lodos antes de la digestión para su higienización.
- Hydrotech Discfilter: Mecánico y autolimpiable, el filtro se encuentra operando en instalaciones de aguas residuales en todo el mundo. En Billund, en los filtros Hydrotech se pueden dosificar productos químicos de precipitación para un control preciso de los nutrientes y las materias en suspensión, lo que mejora significativamente la calidad del efluente.
La configuración de la planta mejorará la calidad del agua de tal forma que sólo se utiliza el 25% del límite de descarga para el nitrógeno, el fósforo y los materiales en suspensión, lo que reduce la cantidad de nutrientes liberados al medio ambiente y ayuda a mantener la biodiversidad en las marismas de los alrededores de la desembocadura del río adyacente.
Mucho más que un proyecto local
Ejemplo de colaboración público-privada, la Biorrefinería Billund ilustra cómo un municipio es capaz de apoyar el objetivo de su gobierno hacia la reducción de residuos a través de la recuperación de recursos. Con un presupuesto de unos 12 millones de dólares, el proyecto se construye con el apoyo financiero del Ministerio de Medio Ambiente y de la Fundación para el Desarrollo de la Tecnología en el Sector del Agua danés.
Combinando las tecnologías ambientales más potentes para el tratamiento del agua y del biogás en un mismo proyecto, esta instalación ejemplifica la filosofía de que los residuos y las aguas residuales no son un problema, sino recursos que ofrecen un enorme potencial para el medio ambiente. Mejorando el tratamiento de las aguas residuales, utilizando la energía y los nutrientes de éstas y de los residuos orgánicos y generando biogás y subproductos utilizables, la instalación es un ejemplo de economía circular, de un ciclo más sostenible en el uso de los recursos.