El confinamiento eleva el consumo de agua de los hogares por encima del 10%
Las medidas de confinamiento por el coronavirus han cambiado de manera sustancial los hábitos de consumo. El descenso en emisiones contaminantes o consumo de servicios básicos ha disminuido globalmente por el parón de las industrias y la actividad empresarial, aunque una parte del gasto se ha desplazado a los hogares que se han convertido en improvisados centros de estudio o trabajo con la ocupación de la vivienda en máximos.
A través de sus soluciones inteligentes de consumo de agua, ISTA ha podido analizar el gasto en 164.000 viviendas españolas que tienen instalados contadores para constatar que, pese al descenso en el consumo global, los hogares han aumentado el suyo en cifras superiores al 10% de media.
La lectura remota de los contadores inteligentes ha permitido realizar este estudio que desvela, entre otros aspectos, que el consumo de agua caliente, entre mediados de marzo y finales de mayo, en los hogares españoles se ha incrementado un 13,8% sobre el mismo intervalo de tiempo del año anterior, mientras que el consumo de agua fría es un 14,50% superior.
“Es cierto que el consumo global ha caído, debido al descenso de la actividad terciaria (oficinas, empresas, escuelas, labores de riego en parques públicos…) pero el estudio pone de manifiesto una relación inversa en los hogares que ahora son los que soportan gran parte de la actividad habitualmente realizada fuera de casa”, explica Ignacio Abati, director general de ISTA.
Otros informes realizados sobre cómo han cambiado los hábitos de los españoles durante este periodo avalan estas cifras. Según datos del Canal de Isabel II, solo en Madrid el consumo de agua durante el mes de abril fue un 6% más bajo, por el parón de la actividad empresarial e industrial, que el de un año antes, pero un estudio realizado en 300 hogares desvela no solo aumentos de consumo doméstico sino también cambios en los hábitos horarios por el uso intensivo de la vivienda. Diversos estudios también han puesto de manifiesto el repunte del consumo eléctrico en los hogares - un 28% de media según la OCU- por similares motivos.
El gobierno español aprobó el pasado febrero una orden ministerial que obliga a sustituir los contadores de agua de más de doce años para facilitar el control del gasto. Se estima que el proceso de modernización de los contadores permitirá ahorros del orden del 15% en la factura de agua anual.
ISTA, especializada en soluciones para la sostenibilidad de las viviendas mediante la digitalización de procesos que permiten controlar el consumos de recursos, es consciente del nuevo rol que ha pasado a jugar el hogar y, además de seguir ofreciendo soluciones de diagnóstico y consulta a sus clientes, tiene en marcha un exigente protocolo de actuación para garantizar la seguridad en la instalación y mantenimiento de contadores, protocolo que nos has permitido ser certificado por Conaif (La Confederación Nacional de Asociaciones de Instaladores y Fluidos) como empresa adherida a su plan de lucha contra la COVID-19.