“La base de una buena feria es su segmentación e internacionalidad”

La mayoría de los objetivos se han cumplido, aunque creo que se puede mejorar en sectorización y debemos potenciar el Riego como sector estratégico en la agricultura.

Una mayor sectorización da muestras del nivel de madurez de un sector y de sus empresas. Por ello, FIMA 2018 ha conseguido dar una nueva vuelta de tuerca a la hora de ofrecer más y mejor. La segmentación es positiva para los profesionales que deben valorarla e, incluso, trabajar para que se consolide. En esta edición, además, se ha crecido en superficie y en número de expositores, pero no por ello se ha dejado de lado la segmentación. En mi opinión, la base de una buena feria está en la segmentación y en su internacionalidad y, en este sentido, FIMA va por el buen camino.

FIMA es, ante todo, un gran escaparate para el mundo agrícola y, en este sentido, hay que destacar que no solo de exposición física vive una feria. Sin duda, un aspecto fundamental para la pervivencia y desarrollo de un certamen profesional con carácter internacional radica en su interés por aportar valor añadido al sector. Así, las jornadas técnicas y todo lo relativo al conocimiento y la innovación que aportan al mercado son básicas para su desarrollo.

En este sentido, FIMA es una cita en la que siempre se ha apostado por los aspectos más novedosos, así como destacar la importancia de la cercanía entre el sector profesional y la Universidad, por ejemplo. Para ello, se trabaja codo con codo con los centros de formación y de tecnología, con las escuelas de negocio y de capacitación con el fin de poder aportar claridad y un mensaje útil para los profesionales.

FIMA siempre está a la vanguardia del sector y, de este modo, trabajamos para ser útiles a las empresas y a los profesionales. El uso de drones, la robótica y aspectos como la digitalización o el control de enfermedades serán, junto a otros muchos asuntos relevantes, algunos de los temas sobre los que versarán las jornadas técnicas. Para esta edición trabajamos en temas como la huella hídrica para preservar el entorno, la agricultura predictiva, el uso de la tecnología en las explotaciones agrarias y, sobre todo, la seguridad y la eficiencia como bases de algunas de las ponencias que se llevarán a cabo en el marco de FIMA.

Indudablemente, el tamaño de la maquinaria que se fabrica en España no se puede comparar con las máquinas que se fabrican en Francia o Alemania. El tamaño de la agricultura no es comparable, ni el clima donde se produce. Todo ello da una dimensión distinta a ferias como Agritechnica, SIMA, EIMA o FIMA. Nuestro entrañable certamen de Zaragoza ocupa un lugar destacado en una feria internacional de maquinaria de tamaño mediano muy enfocada en la agricultura mediterránea.

Esfuerzos para atraer agricultores jóvenes

Uno de los asuntos que más preocupan a todos los agentes del sector agrícola es el rejuvenecimiento del campo. Hoy en día, son muy pocos los menores de 35 años que muestran interés en España por dirigir su futuro profesional hacia las labores en el campo. “Son el futuro de la agricultura y, por tanto, de la supervivencia de la humanidad”, afirma Hernani.

“FIMA trabaja de manera muy estrecha con las Universidades para que los estudiantes de hoy sean los profesionales de las próximas ediciones. Para ello, se hace un gran esfuerzo en atraer a visitantes de estos centros de manera que nos conozcan y seamos su referencia”. El presidente del Comité Organizador tiene claro que “sin agricultura no hay futuro y, por eso, hay que animar a los jóvenes a que lo contemplen con un trabajo más, tan digno e importante como estudiar para abogado, ingeniero o médico”.