Celebradas del 6 al 9 de junio en la finca Zamadueñas (Valladolid)

Más de 1.000 agricultores de toda Castilla y León comprobaron sobre el terreno los resultados de diferentes estrategias de abonado con ENTEC^® comparadas con el abonado tradicional. Para ello se mostraron ensayos de fertilización en trigo.

Un año más, esta vez sin restricciones por la pandemia, se celebraron las Jornada de Campo Eurochem en los campos de ensayo del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (ITACyL), en la finca vallisoletana de Zamadueñas.

Esta campaña los ensayos presentados se refieren a cultivares de trigo, cebada, colza y patata, en los que se aplicaron diferentes estrategias de fertilización con ENTEC^®, comparadas con unas parcelas testigo en las que se aplicó fertilizante convencional.

Según Ángel Maresma, responsable de I+D de EuroChem "estas jornadas permiten llegar a muchos agricultores para, en poco espacio y tiempo, mostrar en campo las estrategias de fertilización más interesantes para la zona. Nuestro objetivo es transmitir conocimiento, formar a los productores y contribuir a mejorar las prácticas de fertilización para garantizar la sostenibilidad de la agricultura. En unas pocas horas nos permite mostrar a muchos agricultores las diferencias de desarrollo del cultivo utilizando diversas estrategias de abonado con ENTEC^® en trigo, cebada, colza y patata. Podemos ver en campo cómo han respondido los cultivos en esta campaña, en la que ha habido varios momentos de estrés".

Miguel Ángel González, responsable de la zona Norte de Eurochem

"Venimos de 2 años de muchísima producción y mucha paja (restos de cosechas anteriores), en trigo. En esta campaña los meses de enero y febrero han sido secos y fríos, a los que sumamos un ataque temprano de pulgón y otros insectos que durante estos meses han introducido virosis en el cereal más algún ataque temprano de hongos (septoria). Esto ha provocado que el sistema radicular de las plantas no se haya desarrollado correctamente y el ahijamiento se ha reducido, las plantas han sido incapaces de absorber todos los nutrientes necesarios aportados en sementera. A eso se añade temperaturas de más de 30 grados en mayo. En nuestro caso, para trigo y cebada, la mejor opción ha sido ENTEC^® 24-8-7 aplicado desde mediados de enero, febrero y marzo aprovechando el agua caída entre marzo y abril ha hecho que el cereal se desarrollara espectacularmente, recibiendo nutrientes cuando la planta más los necesitaba generando un buen desarrollo radicular, ahijamiento, encañado y generando mayor resistencia al estrés hídrico".

Miguel González informando a los agricultores sobre los resultados en una parcela de trigo.

Maresma destaca este año la aplicación única de ENTEC^® 24-8-7 con la que el trigo luce espectacular, con la alternativa de la doble aplicación con ENTEC^® de fondo + cobertera.

En esta campaña, para trigo, dice el responsable de I+D que las dos estrategias que mejor han resultado en los ensayos del ITACyL son la de aplicación única de ENTEC^® 24-8-7 (500 kg/ha) a la salida del invierno, o la doble aplicación de ENTEC^® 15-13-13 en fondo (320 kg/ ha) y de ENTEC^® 27 (250 kg/ha) en cobertera. ENTEC^® 27 cuenta con el nuevo inhibidor de la nitrificación, el DMPSA, que ofrece aún más estabilización temporal del N para favorecer la nutrición de los cultivos. Aunque la aplicación de más o menos fertilizante debe ajustarse al potencial de producción del cultivo en la zona, puntualiza.

Por su parte, Miguel Ángel González, añade que con 500 kg/ha de ENTEC^® 24-8-7 en cereal se aportan 120 unidades fertilizantes (UF) eficientes de nitrógeno, mientras que con un convencional hay que aportar muchos más kg/ha para alcanzar las mismas unidades fertilizantes.

En los ensayos del ITACyL de esta temporada con cebada, la mejor respuesta de este cereal se ha visto en la aplicación de 250 kg/ha de ENTEC^® 15-13-13 en fondo, más 250 kg/ha de ENTEC^® 27 en cobertera. En la alternativa de una sola aplicación se utilizaron 450 kg/ha de ENTEC^® 24-8-7. No obstante, en general, esta campaña todas las parcelas de cebada fertilizadas con ENTEC^® en el ITACyL tenían buen aspecto, y mejoraban a las parcelas de los fertilizantes convencionales.

Ángel Calvo, técnico de Eurochem, da explicaciones sobre el ensayo de patata.

En patata la estrategia que ha funcionando bien esta campaña es la aplicación en fondo de 800 kg/ha de ENTEC^® 13-10-20 -ya que el N estabilizado se va aprovechando progresivamente por la planta y se reducen las pérdidas-, más 300 kg de ENTEC^® 27 en cobertera. Para Maresma es importante no pasarse con la aplicación de N en cobertera para ganar en calidad de tubérculo y para que la patata tenga mejor conservación en almacén. Por su parte, Miguel González añade que en la doble aplicación de ENTEC^® en patata se busca equilibrio entre nitrógeno y potasio, para que se produzca la mayor cantidad de patata comercializable. No interesa aportar N al final del ciclo, con el fin de evitar desarrollo anómalo de los tubérculos (si se suma a la alta temperatura y a la humedad). Por otro lado, en parcelas con cobertura permanente, se ha hecho una sola aplicación de 1.300 kg/ha de ENTEC^® 13-10-20 (con 182 UF de N y 280 de K). La parcela del ITACyL con una única aplicación es la que mejor aspecto tiene de todo el ensayo de patata.

Ensayo de colza.

En colza es muy importante el azufre, porque el cultivo responde muy bien. En fondo se aplicaron 320 kg/ ha de ENTEC^® 15-13-13 que tiene 12,5 unidades de azufre, más 200 kg/ha de ENTEC^® 27 en cobertera, el producto nitrogenado con más azufre. Si es aplicación única, se aplicaron 500 kg/ha de ENTEC^® 20-10-10, que también contiene azufre. En colza el fertilizante se suele incorporar cuando se ve que el cultivo ha nacido, ya que puede tener problemas de nascencia e implantación temprana. Según Miguel González, "a la colza sembrada en invierno, que venía con buena nascencia y buen desarrollo vegetativo, le han afectado los hielos que pararon en seco su crecimiento, dejó de generar flor y, por tanto, bajará su rendimiento. En este caso, con el ENTEC^® 15-13-13 lo aplicamos una vez que ya está implantado el cultivo y tiene forma de roseta, después en cobertera le añadimos ENTEC^® 26 que aporta 32 unidades fertilizantes (UF) de N, que se unen a las 12'5 UF del abono complejo aplicado en fondo, así cubre todo el ciclo de cultivo. Se ha visto que esa doble aplicación ha funcionado mejor en secano que una única aplicación, al contrario que en el cereal. En regadío, se ha controlado bien. En colza, el azufre que lleva ENTEC^®, le beneficia a la planta para absorber mejor los otros nutrientes y ayuda a aumentar el porcentaje de aceite de la semilla".

Equipo de Eurochem presente en las Jornadas celebradas en el ITACyL.

En ensayos científicos realizados por Eurochem en años anteriores, aún reduciendo un 20% las dosis de ENTEC^®, se consiguió incrementar la producción una media del 5% en los ensayos. Según Ángel Maresma, “se aumentó la eficiencia del uso del N en un 27%, que es uno de los objetivos principales que tiene la agricultura para proteger el medio ambiente”.

En esos ensayos de 2019 -el último año de resultados antes de la pandemia-, se obtuvieron muy buenos resultados en cebada y, en general, en todos los cultivos. En cebada se obtuvieron hasta un 31% más de producción con respecto al testigo con abonos convencionales, aplicando 300 kg/ha de ENTEC^® 15-13-13 en fondo y 250 kg/ha de ENTEC^® 26 en cobertera.

En colza se sacó un 24% más de producción sobre la estrategia de fertilización convencional, aplicando 350 kg/ha de ENTEC^® 15-13-13 en fondo y 200 kg/ha de ENTEC^® 27 en cobertera.

En trigo se obtuvo un 12% más sobre el fertilizante convencional, aplicando 350 kg/ha de ENTEC^® 15-13-13 en fondo y 250 kg/ha de ENTEC^® 27 en cobertera.

Y, finalmente, en patata se consiguió un 39% más de producción que sobre la estrategia de fertilización convencional -excluyendo el destrío-, aplicando 800 kg/ha de ENTEC^® 13-10-20 en fondo y 300 kg/ha de ENTEC^® 27 en cobertera.