Campoagrícola cierra “un buen año” con incremento de la facturación
El especialista en recambio agrícola Campoagrícola cierra 2021 con un incremento de la facturación y se plantea para el próximo año mejorar el servicio en un contexto que considera difícil.
![En Campoagrícola han diseñado una trazabilidad para los conjuntos chisel, basada en órdenes de producción por pedidos En Campoagrícola han diseñado una trazabilidad para los conjuntos chisel, basada en órdenes de producción por pedidos](https://img.interempresas.net/fotos/3100381.jpeg)
Eso sí, los responsables de la empresa navarra se muestran autocríticos al reconocer que el servicio ofrecido “no era el que queríamos dar”. “Trataremos de mejorar ese aspecto”, afirma José Luis Goicoechandia. Y es que, según señala el gerente, 2021 será recordado en el sector como “un año totalmente atípico”, marcado por la fuerte carga de trabajo de los primeros meses, el incremento del precio del acero y el miedo al desabastecimiento, lo que hizo que las compras se adelantasen. “Como el precio del acero no se ha estabilizado y los plazos de entrega de este se han dilatado, seguimos en la misma dinámica”, afirma el directivo.
Dado que las previsiones no auguran un cambio sustancial del escenario global en los próximos meses, Goicoechandia pronostica un 2022 “difícil. “El agricultor no puede elegir: trabaja o trabaja. En este sentido, tendrá que renovar y reparar maquinaria, comprar repuestos, etc”.
![Equipo directivo de Campoagrícola: José Goicoechandia e Ignacio López, socios y fundadores y Jose María Valencia, director comercial... Equipo directivo de Campoagrícola: José Goicoechandia e Ignacio López, socios y fundadores y Jose María Valencia, director comercial...](https://img.interempresas.net/fotos/3100383.jpeg)
Los problemas de suministro de materiales están impactando de manera global a todos los tipos de empresas, independientemente de su tamaño. El gerente de Campoagrícola cuestiona que “Europa y los países del NAFTA han hecho una ley antidumping para evitar la entrada de acero de terceros países, sin tener capacidad para absorber su propia necesidad”. “Sólo en el viejo continente”, prosigue, “el déficit de acero está en torno a 12 millones de toneladas, las acerías europeas necesitan tiempo para adaptar sus producciones”.
Goicoechandia tiene muy claro que esta situación “la hemos creado entre todos” y prefiere no señalar culpables, sino “buscar soluciones”. “A esto debemos añadir, el aumento de los precios de la energía, del transporte, de la pintura etc. Es evidente que nos van a afectar”.