La gama Black Bull es sinónimo de velocidad, seguridad y elevadas prestaciones, entre otras características

Dos años de estudios, experimentación, simulaciones computarizadas y ensayos de amplio espectro en los materiales, métodos exclusivos de producción y, principalmente, millones de euros de inversión. Todo esto, sustentado por "la intuición y la tenacidad del equipo técnico", ha contribuido al desarrollo de una nueva generación de ejes para la maquinaria agrícola: la serie Black Bull.

ADR asegura haber revolucionado el concepto de eje en todos sus aspectos: el peso, la velocidad, la seguridad y la duración. En ese sentido, Black Bull es sinónimo de liviandad, sin por ello tener que renunciar a la robustez y fiabilidad: es el producto preparado para afrontar un futuro que ya ha comenzado, que verá la difusión de suspensiones hidráulicas en el sector de las máquinas agrícolas. La serie también es sinónimo de búsqueda de nuevos materiales. Para obtener una reducción significativa de peso y alcanzar objetivos programados, la estructura del eje ha sido totalmente rediseñada, partiendo de un tubular de perfil original, realizado en acero de alta resistencia. Una selección que nace, junto con el desarrollo de las manguetas forjadas en acero especial, de la colaboración con acerías de vanguardia en Europa.

Eje de la serie Black Bull de ADR.

ADR ha reexaminado completamente algunos importantes procesos productivos y ha logrado obtener "una perfecta correspondencia del cuerpo tubular a todo tipo de esfuerzo", gracias a un método exclusivo de soldadura que asegura una resistencia decididamente superior a la obtenida a través de los métodos tradicionales, sin solución de continuidad con el material base.

Se han diseñado nuevos módulos para la mecanización del tubular como el de las manguetas y el resultado, según explica la empresa, es "la perfecta concentricidad entre todos los componentes del eje, con la ventaja de un menor desgaste de los neumáticos y una perfecta eficiencia de los frenos". El sistema especial de forjado (original de la compañía) permite realizar manguetas que garantizan un acoplamiento perfecto con el tubular: elevada precisión y una excelente relación peso-resistencia.

La reducción de peso, los rigurosos ensayos en los materiales y las soldaduras y los innovadores procesos productivos colaboran a brindar mayores prestaciones a la gama Black Bull. Una duración prolongada y una economía de mantenimiento en un mismo producto puede cubrir velocidades de ejercicio que varían entre 20 y 100 km/h y superiores. Los ejes están dotados de un menor peso que significa mayor caudal, economía de combustible y reducción de los tiempos de trabajo. Están realizados en materiales de calidad que aseguran mayores márgenes de seguridad. Los componentes de alta calidad aseguran la precisión del ensamblado y una mayor eficacia de los frenos. Asimismo, incorporan sistemas de autoviraje y dirección patentados, sensibles y precisos. Cabe destacar también la flexibilidad estructural programada durante la fase de proyecto para optimizar la eficiencia de la suspensión en caso de golpes y fondo irregular. Hay una compatibilidad absoluta con todos los componentes accesorios de la gama ADR. No en vano, Black Bull es "sinónimo de velocidad y seguridad".

El proceso especial de producción de la mangueta y la reducida tolerancia axial entre las partes, aseguran un acabado de los asientos de los cojinetes mucho más preciso de aquel realizable con los métodos tradicionales y una mayor densidad de material en el acoplamiento entre mangueta y cojinete. Este es un requisito indispensable de seguridad, dadas las velocidades siempre más elevadas a las cuales están sujetas los ejes. Gracias a sus características constructivas Black Bull reagrupa en sí mismo las prerrogativas de robustez de un producto 'heavy duty' para velocidades desde 20 km/h y la sofisticación de ejes de autopista.

Flavio Radrizzani, Presidente de ADR, dice "para la nueva serie Black Bull hemos partido de los mejores resultados obtenidos en años de experiencia y los hemos reelaborado usando todo lo que los materiales de hoy y la tecnología de procesamiento nos ha puesto a disposición. Esta es la razón por la cual los ejes Black Bull están "más que preparados para afrontar los desafíos futuros más difíciles".

Los nuevos ejes de la firma están pensados para maquinaria agrícola.