Asaja Córdoba pone en marcha una iniciativa pionera en España contra la tuberculosis bovina
Asaja Córdoba ha presentado un proyecto destinado a paliar la grave incidencia que hoy por hoy causa la tuberculosis bovina. En la sede de organización agraria en Córdoba se reunió a un numeroso grupo de ganaderos de vacuno de la provincia, a los que personal técnico de alta cualificación del Instituto de Recursos Cinegéticos (Irec) de la Universidad de Castilla La Mancha pudieron trasladarles las bases de un proyecto de investigación que se va a poner en marcha de manera inmediata.
Asaja Córdoba viene denunciando desde hace meses la situación crítica que atraviesan los ganaderos de vacuno en extensivo de nuestra provincia, que asisten con impotencia al sacrificio sistemático y repetitivo de sus animales, tras los saneamientos que periódicamente llevan a cabo en sus explotaciones, con las pérdidas millonarias que ello conlleva.
Ante esta situación, la organización agraria cordobesa contactó con el Instituto de Recursos Cinegéticos (Irec) de la Universidad de Castilla La Mancha, a fin de poner en marcha un proyecto de investigación que estudie el origen de los contagios de tuberculosis y las medidas para evitarlos.
A través de fincas de vacuno en extensivo localizadas en nuestra provincia, el proyecto pretende diagnosticar para cada caso, cual es el origen de los contagios de tuberculosis que sufren las vacas, y cuales son, en cada caso, las medidas a adoptar de cara a eliminarlos, o en su caso, reducirlos. Para ello cada explotación recibirá, al final del estudio, un programa especifico de mitigación del riesgo de trasmisión de la Tuberculosis Bovina.
Serán fincas localizadas en toda la mitad norte de la provincia de Córdoba, de manera que se someterán a estudio fincas localizadas en la zona de Almodóvar del Río, Posadas o Hornachuelos (zona oeste), así como fincas ubicadas en Cardeña, Torrecampo (Zona este), pasando por explotaciones localizadas en el Valle de los Pedroches (zona norte) y en la propia sierra del municipio de Córdoba (zona central).
Para cada finca se hará un estudio de la interacción entre el ganado vacuno y la fauna silvestre, en especial ciervos y jabalíes, como principales reservorios de la enfermedad. También se analizará la existencia o no de otros tipos de ganado en la explotación, conviviendo con el vacuno, como ovino, porcino o caprino, respecto a los que también se estudiará la interacción de estas cabañas con las de vacuno.
En el desarrollo del proyecto, se tomarán muestras sobre animales, de forma que se podrá diagnosticar de forma objetiva qué porcentaje de la cabaña ganadera pudiera ser portador de la tuberculosis.
Otra medida complementaria será la de analizar muestras de animales abatidos en cacerías en aquellas explotaciones ganaderas que además sean coto de caza para someter así a la fauna silvestre a una analítica postmortem que pueda ser indicadora de la incidencia de la tuberculosis sobre ungulados silvestres presentes en el lugar.
Dado que está más que demostrado que la bacteria que causa la enfermedad se localiza en los puntos de agua, y en los lodos y barros de los bordes de charcas, pantanos..., también se actuará de forma dirigida sobre éstos. Se pretende así aislar puntos de agua, para que solo pueda acceder el ganado doméstico, con puertas abatibles dotadas de mecanismos -ya probados con éxito- que permiten que el ganado vacuno acceda a la charca sin que lo puedan hacer las reses de caza mayor.
Con este proyecto, Asaja Córdoba pretende emitir un informe, para cada una de las fincas participantes, con el diagnóstico de la enfermedad, los agentes causantes, y las medidas paliativas a poner en marcha. Con ello, además de con los saneamientos periódicos que los ganaderos realizan sobre sus cabañas, se espera poder afrontar y paliar la dramática crisis sanitaria que atraviesan nuestras explotaciones de vacuno.