El sector aeroespacial se consolida en Cataluña

Otro dato de sumo interés, es que el segundo grupo en importancia por detrás de las empresas son las universidades, los centros de formación y los centros de I+D, que suman un total de 11 en el seno de la Asociación aeroespacial catalana. Este hecho es signo evidente de la necesidad que el sector aeroespacial tiene de profesionales con alta cualificación y de las elevadas cifras de reinversión en actividades de I+D de esta industria, con una media del 13% a nivel europeo.

En un año que ha marcado un compás de espera para las empresas, entre el final del A380 y el lanzamiento de los próximos proyectos aeroespaciales en Europa y EE.UU., la cifra de negocio alcanzada confirma la fortaleza de nuestra incipiente pero dinámica industria aeroespacial.

La siguiente figura marca la evolución de la facturación de las empresas aeroespaciales catalanas en el periodo 2000-2003:

Cataluña es la Comunidad Autónoma que más empresas nuevas -con orígenes en otros sectores industriales diferentes del aeroespacial-, ha sido capaz de posicionar en los grandes proyectos aeroespaciales europeos durante los últimos 2 años.

Baie ha hecho un gran esfuerzo de evaluación de las capacidades industriales y tecnológicas que ya estaban presentes en el tejido industrial catalán y susceptibles de ser invitadas a migrar parcialmente de sus sectores de origen hacia la aeronáutica o el espacio según los casos.

De hecho, la mejor tarjeta de presentación de Baie delante de las grandes empresas tractoras del sector aeroespacial en España y en el resto de Europa es la gran matriz de capacidades industriales y tecnológicas que acumulan sus socios.

Las principales áreas de expertise de las empresas de Baie son la ingeniería de sistemas, la instrumentación, el software crítico y de control, las comunicaciones, el diseño y la fabricación de interiores, el cálculo estructural, la ingeniería mecánica, los mecanizados de precisión, los composites y los utillajes aeronáuticos.

Es necesario destacar también la significativa presencia de socios de Baie en importantes programas de la Agencia Espacial Europea (ESA), y los nichos específicos de nuestra industria: paracaídas, globos aerostáticos, ultraligeros o pasarelas aeroportuarias (fingers)..

El sector aeroespacial requiere una excelencia industrial, tecnológica, empresarial, e incluso financiera, que no es ni fácil de encontrar en otros países ni fácilmente migrable. Baie quiere aportar su grano de arena en la búsqueda que Cataluña tiene que desarrollar nuevas actividades industriales de muy alto valor añadido, para que lo aeroespacial se imbrique en la economía catalana y tenga, a medio plazo, un peso significativo en PIB industrial.

Cataluña se posiciona y consolida como el cuarto polo de desarrollo del sector aeroespacial en España -con un 5% de la producción aeroespacial española-, por detrás de Madrid, País Vasco y Andalucía, con unas cuotas de mercado del 60%, 15% y 15% respectivamente.

Sin embargo, la profunda apuesta que desde Cataluña se está haciendo por el sector aeroespacial, se refleja en el hecho que a pesar de representar sólo el 5% del sector a nivel español, contaremos a finales del 2004 con el 18% de las empresas certificadas según la nueva norma de calidad aeroespacial EN9100: sin duda la mejor manera de asegurar el éxito a medio y largo plazo de este sector.

Para potenciarlo, el gobierno de la Generalitat se ha fijado tres ejes de actuación:

• El crecimiento de las empresas catalanas ya presentes en el sector aerospacial.
• La atracción de empresas y nuevas actividades.
• La migración de las empresas tecnológicamente avanzadas de sectores como por ejemplo la automoción, la electrónica y el software hacia el sector aerospacial.

El apoyo al sector aeroespacial del Cidem no es un hecho aislado sino que se enmarca en una acción de gobierno en la que se tratan otros aspectos como la formación, la navegación aérea y las infraestructuras.

Esta apuesta de la Generalitat por sectores como el aerospacial no es casual. Ante el agotamiento del modelo de crecimiento actual, la sociedad reclama una política industrial que facilite la transición hacia una economía basada en los conocimientos y que potencie mejoras en la productividad y las actividades de mayor valor añadido. Es decir, hay que avanzar hacia una política centrada en la innovación como motor de crecimiento que situe Cataluña como una de las regiones más innovadoras de Europa.

Superar los 100 millones de euros de facturación cuando se ha superado ya el pico de trabajo en el Airbus 380 y todavía no se ha empezado a trabajar en el próximo avión del consorcio europeo, el A400M, es un gran éxito de nuestra industria aeroespacial.

Por otro lado, la participación de nuestras empresas en el anterior proyecto de Airbus, el A380 -un avión de pasajeros de más de 550 plazas que volará por primera vez en el 2006- posiciona la industria catalana magníficamente de cara al proyecto A400M.

Después de la necesaria consolidación del importante crecimiento del año 2002, el lanzamiento del A400M (con una participación prevista para la industria aeroespacial española del 14% del total del proyecto), el sistema de navegación por satélite europeo Galileo y el próximo avión comercial de Boeing, el 7E7, inauguraran una nueva etapa de crecimiento para nuestras empresas aeroespaciales.

Las destacadas capacidades tecnológicas e industriales de nuestras empresas aeroespaciales, junto con la tarea de promoción e impulsión la apuesta catalana por lo aeroespacial que hace Baie, nos permitirán atacar diferentes nichos de mercado en estos proyectos tan relevantes.

En su tarea de impulsión del sector aeroespacial en Cataluña, y de forma paralela a los éxitos actuales de sus empresas, Baie ha ido preparando el camino para una nueva etapa de crecimiento a medio y largo plazo. Son diversas las iniciativas lanzadas por la Asociación en este sentido durante el 2003. Quizás las más destacadas sean:

Con el mismo perfil de promoción e impulsión industrial del sector, nuestra operativa queda enmarcada dentro del Plan Estratégico 2004-2008, a través de 8 líneas de actuación preferentes: estratégica, tecnológica, promocional, productiva, comercial, financiera, formativa y divulgativa.

El CSAG está formado, a día de hoy, por 8 empresas y 5 centros de I+D.

Ingenia está compuesta por 14 empresas de ingeniería con sede social o delegación en Cataluña y por un centro tecnológico de primer nivel que asegurará el liderazgo tecnológico de esta iniciativa.

Ingenia aspira a posicionarse como la ingeniería aeronáutica española de referencia en Europa, capaz de competir por paquetes de alto valor añadido. Ingenia nace con una task-force de 370 ingenieros en su primer año de operaciones y una previsión que alcanza los 560 ingenieros a finales del 2006.

Baie ha tratado de aprovechar este interés de la Comisión para involucrar a sus empresas en los proyectos de I+D+i europeos. Dado que una mayoría de empresas de Baie son pymes, hemos focalizado nuestros esfuerzos en la participación de nuestras pymes más destacadas aprovechando que esta era también una obsesión de la propia Comisión. En este sentido es importante destacar la participación de una veintena de socios de Baie en diferentes iniciativas del 6º Programa Marco y el aprovechamiento de las diferentes herramientas que el Departamento de Industria, el Cidem y el Ministerio de Ciencia y Tecnología han puesto al servicio de las empresas.

Es muy destacable la apuesta de la Universidad Politécnica de Cataluña hacia el sector aeroespacial. Hace pocos años arrancaron en el Campus de Castelldefels los estudios de Aeronavegación, y en septiembre del 2004 empiezan los estudios de Ingeniería Aeronáutica en el Campus de Terrassa.

Baie ha colaborado en la preparación del Plan de Estudios de estas titulaciones, con el objetivo de ayudar a la Universidad en su búsqueda de la excelencia aeroespacial y en la formación de los técnicos, ingenieros, y empresarios que a buen seguro necesitará el sector aeroespacial catalán en los próximos años para continuar su trayectoria ascendente.

El Plan de Aeropuertos de la Generalitat, aprobado a finales del 2003, es una clara luz de esperanza en este sentido. El Plan prevé una actualización de los 7 aeropuertos catalanes que no dependen del Estado y el establecimiento de 9 aeródromos nuevos.

Entre las consecuencias directas de la íntegra ejecución de este Plan dentro del calendario previsto, podemos destacar: la creación de una red industrial de apoyo a las actividades de este tipo de aviación, la captación de un turismo de alto nivel que ahora no llega a Cataluña, el establecimiento de una red de transporte aéreo real -al servicio de nuestros ciudadanos, empresarios y servicios de emergencias-, y una potencial explosión de la aeronáutica deportiva similar a la que experimentó la náutica en nuestras costas alrededor del año 92.

La Asociación Barcelona Aeronáutica y del Espacio-Baie- fue fundada a finales del año 2000 por iniciativa del Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat de Cataluña (a través del Departamento de Industria y del Cidem), y del Ministerio de Ciencia y Tecnología.

Para Baie, su principal elemento de éxito es el mérito de sus empresarios y de la calidad y capacidad de sus empresas. Sin embargo, el espaldarazo de la Administración ha sido históricamente un factor clave para el correcto desarrollo de este sector en todas partes.

El hecho de que los socios fundadores sean el Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat de Cataluña y el Ministerio de Ciencia y Tecnología es una buena muestra del grado de colaboración y complicidad necesario.

La apuesta inicial que se hizo en Cataluña por la aeronáutica y el espacio a través de la creación de Baie, puede representar una gran aportación al futuro de la economía catalana. Comportará beneficios económicos, industriales, tecnológicos y sociales que ya son evidentes en el corto plazo y que prevén que también lo sean a medio y largo plazo, imbricando este sector como parte fundamental de nuestra economía.

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