La aspirina prolonga la vida del clavel en el florero
16 de junio de 2000
Ahora está comprobado científicamente: el truco de la abuela, de disolver media aspirina en el agua del florero para que las flores durasen más, ha sido confirmado por tres científicos griegos de la Universidad de Salónica. La prestigiosa revista 'Advances in Horticultural Science' (que pese a su nombre inglés está publicada por la Universidad de Florencia, Italia), publica un artículo de M. Petridou, Ch. Voyiatzi y D. Voyiatzi en el cual informan de los resultados de su trabajo sobre prolongación de la vida útil de distintos cultivares de claveles mediante el uso de ésta y otras sustancias. Los claveles cuya agua contenía ácido acetilsalicílico - el componente químico de la aspirina - han durado entre tres y siete días más que las flores que no fueron tratadas. La aspirina, no obstante, dañaba la base de los tallos sumergidos en agua; para evitar esto se debe cambiar el afgua de las flores y ponerles agua destilada tras dos días de tratamiento. Esto no altera mayormente la duración total de las flores y evita los daños mencionados.
Las sustancias inhiben la síntesis del etileno y retardan el envejecimiento de claveles cortados de distintos cultivares, y también mostraron propiedades antibacterianas. La vida útil de las flores puede extenderse entonces sensiblemente usando un producto sencillo, barato y fácilmente accesible.