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El Consorcio Tecnología Agrícola Española abre camino a los productos españoles en otros continentes

Expo'99, las empresas españolas representadas en China

FERNÁNDEZ-REBOLLOS, MARTA17/01/2000

17 de enero de 2000

En la ciudad china de Kunming ha tenido lugar el certámen denominado Expo'99, que ha estado abierto al público entre los meses de mayo y octubre del año anterior. En él, y bajo el pabellón español, han participado numerosas empresas españolas de diferentes sectores como el de la industria de la alimentación y el de la tecnología agrícola. En representación del último, expuso el Consorcio Tecnología Agrícola Española, bajo un invernadero de 1.500 m2 totalemente tecnificado para su producción de cultivos de flores y hortalizas en hidroponía en fibra de coco. Estos cultivos han estado en funcionamiento durante los seis meses que ha durado Expo'99. El Consorcio Tecnología Agrícola Española se creó para ofrecer a este mercado chino un 'paquete' de soluciones tecnológicas perfectamente preparado para la rápida implantación y asesoramiento del cultivo. Éste tiene sus oficinas permanentes en China, en la ciudad de Pekín, con personal chino y un técnico español.
Entre otras acciones comerciales, se encuentra su vinculación con un centro de experimentación de reciente creación de similares características al existente en Almería de la Mojonera y Palmerilla. Este centro se encuentra en Tiamyn y posee departamentos de laboratorios, oficinas y un invernadero de 15.000 m2 dividido en varios bloques para la experimentación de cultivos en diferentes condiciones como invernaderos fríos, con calefacción y umbráculos.
Las firmas que componen el Consorcio Tecnología Agrícola Española están especializadas en diferentes áreas implicadas con la tecnología productiva. Así, en fertilizantes es Codiagro; en estructuras de invernadero, Inverca; en sustratos y geotextiles, Comercial Projar; en semillas, Western Seed; en plásticos, Plastimer; y en riego Mondragón. Todas ellas actúan en el mercado español y de forma no menos importante que en los mercados internacionales, donde la demanda de tecnología de producción supone un mercado en alza y con una alta competitividad.