Aumentar la resistencia de los bosques a los incendios mediante pastoreo del ganado
Este tipo de sistemas, asociados con frecuencia al paisaje mediterráneo, han ido desapareciendo en las regiones atlánticas y subatlánticas pese a tener un gran potencial en la mitigación y adaptación al cambio climático. Sin embargo, desde el año pasado, se ha dado un impulso en esta práctica en zonas forestales del área atlántico y subatlántico gracias a la puesta en marcha del proyecto LIFE Silfore.
Liderado por el centro tecnológico Neiker, esta iniciativa busca demostrar el aumento de la resistencia forestal mediante el silvopastoralismo. Para probarlo, está desarrollando una red de 11 demostraciones o zonas de demostración que combina el pastoreo y la producción forestal en 4 regiones -Portugal, Galicia, Asturias y Euskadi-, abarcando 92,4 hectáreas.
El centro tecnológico presentó los últimos avances del proyecto cerca de uno de los demostradores en una jornada técnica, que contó con la participación de todos los socios y colaboradores del proyecto. Al evento también asistieron el Jorge Garbisu, director de Agricultura del Gobierno Vasco, Andoni Agirrebeitia, director general de Agricultura de la Diputación Foral de Bizkaia y Aitor Iza, alcalde de Orozko. Durante el encuentro se expusieron algunos de los distintos manejos silvopastorales, objetivos, tareas a desarrollar para alcanzarlos, así como los resultados esperados del proyecto, entre los que se encuentra una mayor resistencia de los bosques del territorio a los incendios.
“Prevemos una reducción de volumen de biomasa combustible en un 40-60% y, por tanto, un menor riesgo de incendios, así como una reducción de la huella de carbono en las explotaciones ganaderas. Esto contribuirá a aumentar la diversidad de especies arbóreas, ayudando al mantenimiento de la masa y reduciendo la expansión de enfermedades que afectan a los árboles”, explicó durante su intervención Isabel Albizu, coordinadora del proyecto e investigadora del departamento de Conservación de Recursos Naturales de Neiker.
Tras la jornada, los asistentes realizaron una visita técnica al área demostrativa de Orozko, consistente en un pinar de pino radiata, en el que recientemente se ha introducido ganado bovino. Estas vacas, autóctonas de Euskadi, se introdujeron el pasado viernes 1 de diciembre en el bosque. “Se trata de 12 ejemplares de vacas de raza terreña que cuentan con un dispositivo de vallado virtual que permitirá mantener áreas de muestreo sin pastoreo dentro del cierre a fin de comparar áreas de pastoreo frente a áreas que no han sido pastoreadas”, detalló la investigadora de Neiker.
Además, antes de la llegada de las vacas, este pinar se transformó en un bosque atlántico mixto, tarea puesta en marcha con la colaboración del ayuntamiento de Orozko y del Servicios de Montes de la Diputación Foral de Bizkaia (DFB). En palabras de Albizu, “en esta primera fase se redujo la densidad de pinos, con el objetivo de acelerar la regeneración del bosque natural. Para ello, se tuvieron que eliminar aquellos pinos con especies frondosas a su pie y los que ocupan un gran espacio en la copa, para permitir la entrada de luz necesaria para la repoblación del sotobosque”. Tras el corte de los pinos, las ramas se han apilado y picado, distribuyendo este material en la parcela. Con la extracción de los pinos el terreno ha quedado transitable para el ganado, permitiendo así el pastoreo.