Avances en el conocimiento de la transmisión de la listeria en granjas de leche
La listeriosis es una enfermedad zoonótica de origen alimentario que puede causar, tanto en la especie humana como en los animales, síntomas de gastroenteritis, meningitis, bacteremia y abortos. El patógeno que provoca esta infección es la bacteria Listeria monocytogenes, en cuyo estudio trabaja desde 2011 Juan José Quereda, investigador del Ramón y Cajal y profesor de la Universidad CEU Cardenal Herrera (CEU UCH), donde lidera el grupo de investigación en Patógenos Intracelulares.
Quereda acaba de publicar nuevos avances, en colaboración con investigadores del Instituto Pasteur de París, la Universidad de Iowa y el CNB-CSIC de Madrid, sobre los mecanismos de transmisión de este patógeno, sus características genéticas, antibiorresistencias y su presencia estacional en granjas de leche, que pueden contribuir a diseñar medidas más eficaces para frenar su proliferación y desarrollar nuevos tratamientos contra la infección.
El profesor ha participado en el estudio de la Listeriolisina S, una bacteriocina sintetizada por esta bacteria para facilitar la colonización del intestino, alterando la microbiota, y favoreciendo también su expansión a otros órganos. En este estudio, liderado por el doctor Javier Pizarro Cerdá, que ha publicado la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), han hallado el mecanismo de permeabilización de la membrana de la bacteria mediado por la Listeriolisina S y que facilita su diseminación en el organismo.
Otro de los hallazgos recientes liderado por el profesor Quereda, investigador principal del Grupo ‘Patógenos Intracelulares: Biología e Infección', se ha centrado en el carácter estacional de la aparición de Listeria en explotaciones lecheras, en un estudio realizado junto a investigadores del Departamento de Producción y Sanidad Animal de la CEU UCH, entre ellos, el Grupo ProVaginBIO, liderado por el profesor Ángel Gómez Martín. El análisis de la epidemiología y diversidad genética de Listeria en 19 granjas ha permitido detectar que la presencia de la bacteria varía en distintas épocas del año: aumenta en vacas en invierno y en ovejas en invierno y primavera.
El estudio ha evidenciado que las granjas pueden ser un reservorio de variantes hipervirulentas de Listeria, lo que hace recomendable reforzar las medidas de higiene, especialmente en los periodos de mayor riesgo de prevalencia. También es recomendable evitar el consumo de leche cruda no tratada térmicamente para eliminar patógenos como Listeria, que muere a temperaturas superiores a 65 °C.