Un nuevo pavimento aumentará la durabilidad de las vías ciclistas
14 de mayo de 2012
Por lo general, el ‘carril-bici’ está diferenciado del resto con un pavimento, normalmente de color verde o rojo, conocido como ‘slurry’. El inconveniente de este material (compuesto por mezclas homogéneas de áridos y cargas minerales) es que al estar a la intemperie se deteriora rápidamente tanto por el uso como por las inclemencias meteorológicas.
Precisamente, una de las principales deficiencias del ‘slurry’ que afectan a la seguridad de los ciclistas es la pérdida del color original que reduce la visibilidad de los carriles. En ese sentido, el nuevo pavimento (constituido principalmente por un conglomerado de árido y resina) tendrá un color natural aportado por el árido, por lo que no será necesario pintarlo y, en consecuencia, su duración en el tiempo será mucho mayor.
Además, este producto aportará a las vías ciclistas una mayor adherencia y resistencia al deslizamiento, evitando que el pavimento resbale incluso en los días de lluvia. Otra ventaja a tener en cuenta es que el nuevo material favorecerá el drenaje por lo que evitará charcos y no será necesario obrar sumideros.