Proyecto para preservar el conocimiento e impulsar la producción de lana
La Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (Fademur) ha lanzado ‘Manual de usos de la lana en España’, un libro técnico único en nuestro país. En 202 páginas y 171 ilustraciones e imágenes, el manual abarca cada detalle relacionado con esta fibra natural, desde los pasos para su procesado hasta la situación legal y comercial en que se encuentra, pasando por nuevas actividades de innovación y sostenibilidad.
Fademur arranca con este manual una serie de publicaciones técnicas sobre sectores ligados al medio rural, como el lino o el esparto. El objetivo de todas será el mismo que el de este manual: preservar el conocimiento sobre el sector e impulsar su actividad económica para aprovechar el eje formado por mujeres rurales, sostenibilidad, territorio y cultura.
La lana es una fibra con múltiples propiedades que la hacen útil no solo para la industria textil y, lo más importante, supone un material natural que evita la generación de microplásticos.
A día de hoy, el 64% de las fibras producidas en el mundo son sintéticas. Éstas están detrás de entre el 16% y el 35% de toda la contaminación marina por microplásticos. Investigaciones científicas apuntan que solo la ropa origina más del 80% de los microplásticos existentes en el mar y que además es este formato de microplástico el que consumen con más frecuencia las especies marinas con consecuencias negativas sobre todos sus ecosistemas y nuestra propia cadena alimentaria.
Explotar la lana adecuadamente supone un desarrollo de la economía circular de la ganadería que, además, genera puestos de trabajo en los pueblos, donde el mercado laboral es menos dinámico. Y es que en las zonas rurales de España, las mujeres sufren un 38,4% de tasa de inactividad frente al 15,1% de los hombres rurales.
El sector de la lana fue lucrativo hasta no hace mucho tiempo, pero los problemas que venía arrastrando se han visto agravados con la reciente pandemia y la paralización del sector textil en China, a donde va la mayor parte del volumen. Así, en el ejercicio de 2020 se consiguió solo un 40% de ventas respecto a lo habitual en años anteriores. Además, el precio del kilo de lana merina cayó a unos 40 céntimos de euro en oposición a los 2,5 euros que registraba dos años atrás.
A pesar de ello, las ovejas tienen que ser esquiladas igualmente por razones de bienestar animal y manejo. Por eso, el volumen de producción no está variando significativamente. Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, España registró una producción de 23.121 toneladas en 2020 y de 23.160 toneladas en 2021.