Abonadas las indemnizaciones a los afectados por la viruela ovina y caprina en Cuenca

Francisco Martínez Arroyo, consejero de Agricultura del Gobierno de Castilla-La Mancha, aseguró que ya se han pagado las indemnizaciones por el sacrificio de animales tras los brotes de viruela ovina y caprina detectados en la provincia de Cuenca en el último trimestre de 2022. Debido a ese brote, tuvieron que sacrificarse más de 30.000 ejemplares.

Martínez Arroyo añadió que el sector sabe que la administración regional está trabajando en las ayudas de reposición específicas para los casos de viruela ovina y caprina. “Serán muy importantes para aquellos ganaderos que deseen retomar su actividad, y esperemos que sean todos”.

El consejero defendió que la situación se ha normalizado en Villaescusa de Haro, localidad donde fue necesario sacrificar 28.000 ovejas y corderos tras la detección del primer brote. Asimismo, apuntó que en esta localidad ya se ha introducido ganado ‘centinela’, mientras que en Tébar y La Alberca de Záncara, donde se detectaron dos brotes posteriores, esperan que puedan recuperar los animales en las explotaciones a finales de enero. En Tébar se han sacrificado 2.120 animales, de los que 1.780 son ovejas y el resto corderos, mientras que el La Alberca la cifra ha llegado a 1.670.

Martínez Arroyo también resaltó que se han encontrado fuentes de suministro alternativas a las empresas que han tenido que sacrificar sus animales. “No hay problema en el suministro, no hay problema en el consumo y no hay problema en la calidad de los alimentos”, recalcó. En este sentido, reiteró que la viruela ovina y caprina es una enfermedad que afecta exclusivamente a las especies animales y no puede transmitirse al ser humano.

En este sentido, también pidió “precaución” y seguir trabajando por la salud animal, y recordó los buenos resultados obtenidos en la erradicación de la tuberculosis y la brucelosis, por lo que está convencido de que sucederá lo mismo con la viruela ovina y caprina.