SOERMAR asesora a los asociados de ANEN sobre cómo aprovechar los fondos europeos
En un momento en el que se considera fundamental trabajar para contar con una industria más verde, digital y resiliente, el plan de recuperación Next Generation supone una oportunidad para salir de la pandemia, creando oportunidades y empleo para la sociedad.
En este sentido, la directora general y el director técnico de la Fundación y del Centro Tecnológico SOERMAR (Sociedad para el Estudio de los Recursos Marítimos), Eva Novoa y Alfonso Carneros, han impartido un seminario digital sobre cómo aprovechar los fondos europeos Next Generation a los miembros de la Asociación Nacional de Empresas Náuticas (ANEN), patronal de la náutica de recreo en España, a los que aconsejaron aglutinarse, aprovechar las sinergias y aunar esfuerzos para optimizar recursos y tiempo, ser imaginativos, creativos e innovadores, así como tener unos mecanismos de aplicación impecables.
El evento fue presentado por Carlos Sanlorenzo Ferri, secretario general de ANEN, quien subrayó que “el sector náutico debe aprovechar esta oportunidad, no podemos quedarnos atrás”, y animó a los asistentes a “identificar sus necesidades y oportunidades para presentarlas en el momento adecuado”, además de insistir en la necesidad de “trabajar de forma conjunta” y formar “alianzas estratégicas”.
Eva Novoa repasó los objetivos de los distintos fondos europeos existentes hasta el momento antes de centrarse en los Next Generation. La directora general de SOERMAR destacó que serán 750.000 millones, de los que España recibirá 72.700 en forma de subsidios y transferencias a fondo perdido, “un 80% de las ayudas percibidas de Europa en 32 años y cuya gestión supondrá un reto sin precedentes”. Señaló también que el Gobierno español está obligado a comprometer el 70% de las subvenciones en el periodo 2021-2022 y el 30 % en 2023 y que su ejecución se deberá realizar hasta 2026. Realizó un detallado recorrido sobre los principales hitos desde la presentación del plan del Gobierno español a la Comisión Europea el pasado 30 de abril hasta la transferencia efectiva de los fondos, que se prevé para el cuarto trimestre de 2021, explicando cómo serán las convocatorias y el desarrollo de los programas, informes y ejecuciones.
Comentó, asimismo, los organismos intermedios que se designarán para gestionar los fondos, que cifró en 37 -“18 ministerios, 17 comunidades autónomas y dos ciudades autónomas”-, además de los 148 municipios de más de 50.000 habitantes, “que también se ha acordado que puedan gestionar los fondos”. Un aspecto que, estimó, tiene sus pros y sus contras. “Por una parte, el que haya más agentes gestores y que sean más cercanos supondrá más capacidad y mayor uso de los mismos, pero, por otro lado, existe el miedo de que no estemos organizados y no llegue el dinero a las pymes, de que se pueda producir una mayor dificultad en la coordinación y en los controles y una atomización de las ayudas”.
Para evitar esas dificultades, Novoa opinó que los organismos intermedios y los órganos gestores deberán estar lo suficientemente dotados de medios para poder agilizar la toma de decisiones, utilizar procedimientos uniformes y simples y facilitar el acceso a la información de las convocatorias. Las empresas, por su parte, “deberán analizar primero qué necesitan, elegir el proyecto y luego buscar financiación, ser creativas e innovar dentro de los requisitos de las convocatorias, pues habrá mucha competencia, y, muy importante, aglutinarse, aprovechar sinergias y aunar esfuerzos para optimizar recursos y tiempo, así como utilizar los fondos para realizar una transformación profunda en verde y en digital, y disponer de unos mecanismos de aplicación de esos fondos impecables”.
La directora general de SOERMAR revisó los cuatro ejes (Transición Ecológica, Transformación Digital, Igualdad de Género y Cohesión Social y Territorial), las 10 políticas y las 212 medidas contempladas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno, para cuya implementación ha adelantado ya 27.000 millones en los Presupuestos Generales del Estado a cuenta de los fondos europeos. Además, explicó y mostró gráficos sobre el reparto de ese dinero por comunidades autónomas y por ministerios –“la mayor parte lo gestionará el de Transición Ecológica”- y enumeró algunas de las líneas concretas a las que destinará cada ministerio las ayudas, así como el monto de las mismas, haciendo especial hincapié en aquellas que pueden interesar al sector náutico. Al mismo tiempo, repasó las 15 manifestaciones de interés que ya han sido lanzadas, relacionadas con energía sostenible, modernización de la industria, conectividad digital, reto demográfico, Inteligencia Artificial o digitalización de pymes y autónomos, entre otras.
Nuevos proyectos
Alfonso Carneros, por su parte, expuso los proyectos en los que está trabajando SOERMAR, enmarcados en las líneas fundamentales de su Plan Estratégico 2020-2030. Mencionó algunos de los relacionados con el área de medio ambiente y la reducción de emisiones, como el europeo SEABAT, para desarrollar nuevas baterías modulares para buques, y otros referidos a procesos productivos respetuosos con el medio ambiente. Respecto al área de digitalización, comentó proyectos como la digitalización, automatización y robotización de algunos procesos, sistemas de mantenimiento inteligente para astilleros o el Green Hidrógeno Cantabria, en colaboración con el Clúster MarCa, para cuya puesta en marcha se está montando un consorcio con 26 empresas.
Durante el turno de preguntas, José Luis Fayos, responsable del Área Técnica y de Internacionalización de ANEN, insistió en la necesidad de buscar aliados para solicitar las ayudas, “ya que una de las claves del éxito es tocar las teclas adecuadas para un posicionamiento arriba en el ránking, porque hay muchos competidores”, y abogó por “identificar los programas y compañeros de viaje más adecuados para tener el mayor éxito”.
Como conclusión a su exposición, la directora general de SOERMAR resaltó que “estamos ante la que posiblemente sea la mejor oportunidad para diversificar nuestra economía y subirnos definitivamente al tren de la modernidad”.