La venta de genética como complemento a la rentabilidad de las explotaciones caprinas
Diego Morcuende es un joven ganadero que ha tomado recientemente el timón de una explotación de la raza caprina Murciano-Granadina en la localidad abulense de Candeleda, que fue desarrollada en un principio por su padre. La granja Morcuende Garro cuenta con unos 350 animales dedicados a la producción de leche.
Además de esa producción de leche que se destina a una quesería de la zona, se trabaja con gran énfasis en la mejora genética y en la selección de los animales, vendiendo chivas y sementales de diferentes edades.
Su cuidada genética y el aporte extra que aporta a las ganaderías de destino provoca que esta explotación haya vendido genética a explotaciones situadas en las comunidades autónomas de Extremadura, Castilla-La Mancha, Andalucía y Cantabria, además de un pionero envío de animales a Mallorca.
La venta de genética por parte de algunas explotaciones se convierte en un ingreso complementario, que se une a los más habituales de la venta de leche y de carne, para intentar alcanzar la cada vez más complicada rentabilidad en el sector caprino.