Una empresa de Fuerteventura elabora un innovador queso con sabor a vino tinto
Al aceite, al pimentón o al gofio. Estos han sido quizás los sabores tradicionales con los que siempre se han bañado los quesos de cabra de Fuerteventura para madurarlos y conservarlos mejor. Pero cada día son más quienes se atreven a ir un paso más allá y experimentar cosas nuevas con el producto estrella de la Maxorata. Es el caso de María Cabrera, que se autodefine como maduradora y los prepara también al tomillo y a la albahaca. En su tienda, Sabores Canarios, además los vende de orégano, cuya preparación en este caso consiste en añadir la especia a la cuajada antes de prensarla para hacer el queso, según publica Canarias 7.
Pero entre los sabores más curiosos sin duda destacan dos: el de tuno indio y, sobre todo, el de vino tinto, que confieren al producto un colorido morado muy llamativo que abre el apetito poniendo en marcha la segregación de saliva hacia el paladar.
“El queso se baña con vino, luego se le da un tiempo de maduración, se vuelve a bañar con vino, se espera otro tiempo de maduración y ya está listo para comerse”, explica. El resultado de la experiencia fue todo un éxito.