Entrevista a Paz García, Head of Food Market Segment Management de Ziehl-Abegg
En todas las áreas de la cadena alimentaria existe una demanda cada vez mayor de tecnología de ventilación eficiente, flexible y que ahorre energía. El movimiento de aire es un elemento fundamental en muchos procesos de producción, utilización, conservación, almacenamiento y preparación de alimentos. Conscientes de ello, Ziehl-Abegg proporciona numerosas soluciones de ventiladores y sistemas completos optimizados para las diferentes áreas de aplicación y desafíos de la cadena alimentaria.
Ziehl-Abegg se fundó en Berlín en 1910 como fabricante de motores eléctricos. ¿cómo ha sido el camino hasta convertirse en un referente sistemas de ventilación, técnicas de regulación y técnicas de accionamientos?
Efectivamente, la fundación de Ziehl-Abegg se remonta a 1910, aunque Emil Ziehl ya venía trabajando en su diseño del primer motor de rotor externo durante más de 20 años y su patente del giroscopio eléctrico tiene fecha de 1900. A partir de ahí y hasta la década de los 40, Ziehl-Abegg mostró un desarrollo brillante tanto tecnológicamente como desde el punto de vista empresarial. A la finalización de la Segunda Guerra Mundial, Ziehl-Abegg llegó de la mano de la segunda generación Ziehl y la nueva realidad en Alemania y en Europa supuso grandes cambios, el primero de ellos el cambio de ubicación, de Berlín a Künzelsau, en el sur del país. Sin embargo, esto sólo supuso una revitalización en el impulso de crecimiento de la empresa; en términos de producto aquí comienza el desarrollo de los productos de ventilación basados en el motor de rotor externo. Los beneficios en términos de compactibilidad y eficiencia de estas nuevas soluciones se revelaron innegables y lo que inicialmente fue un desarrollo nacional, a partir de los 70 comenzó a expandirse también fuera de Alemania y de Europa.
Hoy en día, Ziehl-Abegg es una Societas Europaea con 15 puntos de producción en todo el mundo, presencia comercial en 117 países y más de 5.000 empleados. El I+D+I sigue siendo el centro de nuestra filosofía, traer al mercado productos que aporten el máximo valor añadido a las diferentes aplicaciones, con el cliente como punto de fuga. Esto exige de nuestros profesionales, tanto técnicos como comerciales, una formación y un conocimiento profundos de nuestros productos, los sectores en que nos desenvolvemos y sus aplicaciones, porque la atención que aspiramos a proporcionar va más allá de simplemente vender ventilación industrial. Nuestro propósito es ofrecer orientación y consultoría para que la incorporación de la tecnología Ziehl-Abegg a cualquier segmento industrial en que nos introduzcamos, y concretamente al alimentario, marque una diferencia en la cadena de valor y nos convierta realmente en ese referente de sistemas de ventilación, técnicas de control y accionamientos.
Su gama de soluciones para la transformación alimentaria es muy amplia. ¿Podría destacarnos los equipos más interesantes para los productores de alimentos?
Cuando pensamos en la producción y la transformación alimentaria de hoy en día, un ventilador no es lo primero que se nos viene a la mente y, sin embargo, en la gran mayoría de los procesos el movimiento de aire es un factor relevante o incluso crucial. Desde la agricultura en ambientes controlados – CEA (invernaderos, vertical farming, salas blancas, …), la ganadería de precisión, la maduración, el desverdizado, el secado, la deshidratación y la preservación de frutas, verduras y hierbas, el curado y ahumado de pescados y carnes, la producción de pastas y masas, la congelación y descongelación optimizada de todo tipo de alimentos hasta los sistemas de última generación de cocinado y horneado profesionales, el elemento diferenciador que marca el valor añadido al producto final es la capacidad de optimizar el manejo del aire involucrado en cada proceso.
Esto es lo que los sistemas de ventilación Ziehl-Abegg vienen a aportar a este segmento de mercado: la fiabilidad en el manejo del aire, que junto con la eficiencia y las altas prestaciones alcanzadas gracias a los motores de última generación y los rodetes de diseño biomimético, permiten dar el siguiente paso en la ingeniería agronómica y la industria alimentaria.
Todo esto está presente en el portfolio de ventiladores axiales y radiales Ziehl-Abegg, perfectamente complementado por los sistemas de control específicamente desarrollados para la operativa combinada en cada una de aquellas aplicaciones, y culminado por todas las posibilidades de conectividad incorporados por los motores de conmutación electrónica, el IoT de los elementos de monitorización y la solución ZAbluegalaxy de nube privada con código abierto. Todo un mundo de tecnología abierto por fin al sector alimentario.
Centrándonos en la producción agronómica, las aplicaciones demandan fiabilidad en cuanto a caudal y alcance de aire, combinada con la máxima eficiencia por supuesto, el objetivo es la minimización de consumo energético por kg de producto. Esto es lo que proporciona la gama de ventiladores axiales dedicadas a la producción vegetal y animal: los equipos FE2owlet, FE3owlet, FFowlet y MAXventowlet, diseños biomiméticos basados en el borde desflecado de las plumas remeras del buho, combinados o no con los sistemas ZAplus, con las dos tecnologías de motorización, AC y EC y la plataforma ZAbluegalaxy.
Cuando pasamos a las aplicaciones de transformación alimentaria, los diseños son más específicos, dedicados a cada proceso. Aquí conseguimos incorporar más y más soluciones centrífugas, con el consiguiente incremento de eficiencia aerodinámica aportada por de estos sistemas. Los principales sistemas incorporados a esta industria son los C, Cpro, Vpro, ZAventero y ZApilot, con la posibilidad de añadir la rejilla ZAflow como componente optimizante de la aerodinámica de sistema y de nuevo con las dos tecnologías AC y EC y la plataforma ZAbluegalaxy.
En este sentido, la conservación de la cadena del frío y el almacenamiento es esencial para asegurar la inocuidad de los productos. ¿Qué soluciones ofrecen para ello?
Nuestro lema es ‘Conservar mejor para producir más’. Esa es la forma de afrontar los retos que los incrementos y los movimientos demográficos esperados a lo largo de las próximas décadas plantean. Y la forma más versátil, más eficiente y más barata de mejorar la preservación de los alimentos es manejar adecuadamente los flujos de aire involucrados en las cámaras de conservación y en los almacenes de alimentos. El producto que evitamos que se deteriore o se pierda siempre tendrá mucho más valor que cualquier inversión en la más puntera tecnología de ventilación; esto es algo bastante evidente si lo pensamos, y sin embargo las partidas en que más frecuentemente se ahorran recursos es en las relacionadas con la ventilación y la cadena de frío especialmente en el mundo agrario y alimentario.
A la hora de desarrollar nuestras gamas dedicadas al almacenamiento de alimentos nuestro lema es ‘Fiabilidad’ (basada en la óptima ingeniería, la responsabilidad a la hora de alcanzar los rendimientos anunciados y la durabilidad) y ‘Altas Prestaciones’ (más caudal a un costo menor, menor presión sonora y un control inteligente de los sistemas). Todo ello se refleja en nuestros conceptos para almacenamiento: FE2owlet, FE3owlet, MAXventowlet, ZAsilo, PR2, con tecnología AC y EC y la plataforma ZAbluegalaxy.
Para idear y crear productos, cuentan con el centro de desarrollo InVent, donde prueban y testean sus equipos. ¿Qué parámetros persiguen cuando desarrollan sus equipos para la industria alimentaria?
La industria alimentaria es vital en nuestro mundo actual, aunque los sistemas de producción de alimentos están bajo constante cuestión por su impacto en la salud pública y el medio ambiente. Es por esto que nuestros objetivos fundamentales a la hora de desarrollar nuestros productos para este sector son:
- Seguridad Alimentaria. Partiendo de la normativa que cada año más se sanciona en las diferentes zonas de referencia a nivel mundial; en nuestro caso nos centramos principalmente en las directivas de la Unión Europea, la FDA y para aplicaciones concretas tomamos como referentes países como Brasil, Japón o China. En general nos centramos en materiales inertes que no permitan la proliferación de patógenos y minimicen o cancelen los procesos corrosivos. Para las gamas alimentarias ZIEHL-ABEGG recurre a metales como el aluminio o el acero inoxidable, normalmente el de calidad alimentaria (AISI 304 / EN 1.4301 / SUS304 / 0Cr18Ni9) y a materiales compuestos de alto rendimiento, como el PPGF40 (polipropileno con un 40% de fibra de vidrio), el PA6GF#0 (poliamida con un 30-40% de fibra de vidrio) o el ZAmid (poliamida con un 50% de fibra de vidrio). Además, utilizamos pinturas alimentarias siempre que la aplicación lo requiere. Por otro lado, nuestro convencimiento es que la fiabilidad en la documentación técnica que facilitamos a nuestros clientes, la trazabilidad y la durabilidad de nuestros sistemas es la mejor garantía de seguridad alimentaria para sus productos: las prestaciones indicadas se corresponden con las ofrecidas por los equipos reales, constituyendo una base sólida para un cálculo preciso de ingeniería en las diferentes aplicaciones y evitando mayoraciones innecesarias. Por otra parte, esta fiabilidad ayuda a conseguir la tan deseada sistematización de resultados en la industria alimentaria: mismas cantidades – misma calidad en cada ciclo productivo, clave del éxito en este mercado.
- Sostenibilidad. Máxima eficiencia de sistemas de ventilación, monitorización de operativa (consumo, vibraciones…), durabilidad, resiliencia y optimización de procesos para la minimización de pérdidas y desperdicios. Esto contribuye a la reducción de la huella de carbono de las diferentes aplicaciones
Sólo contando con un laboratorio certificado de precisión como el InVent, donde se testean y certifican todos los desarrollos de Ziehl-Abegg antes de lanzarlos al mercado, es posible conseguir esos objetivos.
En 2023, Ziehl-Abegg registró cifras récord, con un aumento de las ventas del 9,5%, hasta alcanzar los 955 millones de euros. ¿Cuáles son sus objetivos de futuro para seguir creciendo?
Aún cuando la industria alimentaria es una de las más importantes a nivel global en términos de valor de mercado, está lejos de estar a la vanguardia en cuanto al uso de la tecnología. De hecho, hasta ahora ha sido el último sector en incorporar las innovaciones técnicas que se han incorporado hace décadas en otros mercados. En Ziehl-Abegg nos hemos propuesto luchar contra esta realidad e introducir la última tecnología de ventilación en las aplicaciones alimentarias, porque creemos firmemente que cualquier sector justifica y rentabiliza el uso de la tecnología.
La introducción de Ziehl-Abegg en las aplicaciones de producción y transformación alimentarias de forma directa sólo empezó en 2018. El año pasado ya significaba un 13% de la facturación global y más de un 20% si consideramos también las aplicaciones de cadena de frío. Esta diversificación implica seguridad y revitalización en nuestro modelo de negocio, objetivos más que interesantes frente a los ciclos de cambio cada día más frecuentes en nuestra realidad actual.
Nuestro propósito es mantener estas cifras en los próximos años, aún con los ambiciosos objetivos de crecimiento del grupo a nivel global. Por otra parte, nos hemos marcado como meta distribuir de forma homogénea estos porcentajes por las diferentes zonas geográficas.
